Piden extradición del boliviano condenado a la horca en Malasia
La Paz y Santa Cruz
La familia de Víctor Parada busca que se le conmute la pena de muerte y que sea extraditado a Bolivia para que cumpla su condena por el delito de narcotráfico.
Silvia Vargas, explicó que lo último que ha hecho, luego de que su hijo fuera condenado a morir en la horca, fue procurar un encuentro con el presidente Evo Morales. En enero viajó a La Paz con esa finalidad, pero lo único que logró fue una reunión con personeros de la Cancillería a quienes puso al tanto del caso.
En octubre de 2013 la vida de Silvia dio un giro de 180 grados. Después de buscar por dos meses noticias de su hijo Víctor Parada, se enteró que éste había sido detenido en Malasia cuando intentaba ingresar a ese país con cerca de medio kilo de cocaína. El 5 de enero de este año la justicia de ese país determinó que el boliviano pague con su vida la comisión de ese delito.
La mamá de Víctor tiene la esperanza de que intervenga el Estado para lograr que al joven de 30 años y padre de un niño de seis, se le conmute la pena.
El viernes, parlamentarios del oficialismo y de la oposición pidieron a la Cancillería de Bolivia interceder a favor del boliviano. “En este caso la Cancillería se tiene que pronunciar a la brevedad posible, porque nosotros tenemos cuerpos diplomáticos y representantes en la mayoría de los países del mundo”, dijo la diputada de Unidad Demócrata, Shirley Franco, según una nota de la agencia estatal ABI.
Yoli, hermana de Víctor, contó que en 2003 su madre partió de Bolivia rumbo a España en busca de mejores días para su familia y pocos meses después se llevó a sus cuatro hijos, incluido Víctor. Sin embargo, en 2009 su hermano fue deportado por su condición de ilegal.
En Santa Cruz, la familia Parada Vargas es de Minero, el joven se disponía a comenzar una nueva vida cuando cayó en desgracia: un accidente laboral, cuando trabajaba para una empresa. “Una viga de 800 kilos le cayó encima, si bien sólo le amputaron dos dedos, la mano le quedó inútil”, explica Yoli.
La complicada situación económica, con un hijo por quien velar y dificultado para conseguir trabajo (hecho que no contó a su familia en España), lo orilló a aceptar dinero prestado de un ciudadano africano y al no poder cumplir con el plazo de devolución, el hombre lo obligó a convertirse en “mula”. Fue cuando cayó detenido en Kuala Lumpur, capital de Malasia.
Víctor estaría en condiciones infrahumanas en la cárcel de Malasia.
SOLIDARIDAD
Minero, movilizado por Víctor Parada
Autoridades del municipio de Minero, en el norte de Santa Cruz, lamentan lo que pasa con su paisano, dijeron que buscarán la forma de tomar contacto con sus familiares para ayudarlo.
“Es una situación realmente lamentable. Pienso que las condenas de pena de muerte deberían desaparecer y los culpables de los delitos someterse a otro tipo de sanciones”, indicó la concejal Maria Luz Téllez. Dijo sentirse en la obligación de apoyar en todo lo que pueda a la familia del hombre sentenciado.
“Vamos a buscar la forma de establecer algún contacto con sus familiares”, dijo Téllez.