Rieles que pretenden vender como chatarra tienen un valor histórico
Las 3.926 toneladas de acero de rieles y durmientes que se sacaron de un tramo de la red ferroviaria de Cochabamba para el tren metropolitano tienen un gran valor histórico, ya que formaron parte de la línea que se construyó con la compensación económica del Tratado de 1904 con Chile. Pero, ahora hay la posibilidad de venderlos.
El tratado que se elaboró durante varios años intentó suplir la falta de una salida al mar con un ferrocarril entre Arica y La Paz y el pago de 300 mil libras esterlinas.
Sin embargo, la venta depende de la aprobación de un decreto supremo de desvinculación de los 37 kilómetros de vía férrea que fue concesionada a la empresa Ferroviaria Andina (FCA).
La vía férrea comenzó a ser desmontada en septiembre pasado. Los tramos retirados fueron de la ruta de la ciudad hasta Sipe Sipe y del kilómetro 6 de la avenida Petrolera, que dejaron de usarse en 1996 tras la Capitalización.
El decreto de desvinculación es elaborado desde el último trimestre de 2017 y a la fecha está en etapa de corrección. Se estima que en un mes y medio más esté concluido y aprobado, indicó la responsable del área legal de la Unidad de Ferrocarriles del Ministerio de Obras Públicas, Jaqueline Guzmán.
“Después de la aprobación del decreto de desvinculación se generará un contrato modificatorio a los contratos de concesión que nosotros tenemos con las ferroviarias que están trabajando en nuestro país, que en este caso sería la FCA”, dijo. Tanto ENFE como la Autoridad de Telecomunicaciones y Transporte (ATT) “han solicitado que haya coincidencia del documento con lo que establecían los contratos de concesión y eso se está subsanando”, explicó.
Una vez que el decreto sea aprobado, el Congreso Nacional lo debe aprobar y de ahí los rieles y durmientes desmontados serán transferidos a la ATT y, posteriormente, a ENFE para su venta como chatarra o para su uso a las empresas férreas.
Pero, aunque, la ley esté aprobada el proceso para la venta de los rieles todavía será largo debido a que ENFE debe seguir los procedimiento del Decreto Supremo 181 de Normas Básicas de Contratación del Sistema de Administración de Bienes y Servicios.
Guzmán dijo que la construcción del tren metropolitano tiene una ley que lo declara prioridad nacional, por lo que, justifica que el Consorcio Tunari haya sacado los rieles antes de la aprobación de este decreto supremo de desvinculación con la FCA.
Costo
Las empresas del consorcio Tunari sacaron 2.400 toneladas de rieles de acero y 1.526 de durmientes.
El precio del acero de alta resistencia en el mercado nacional está en 880 dólares por tonelada, por lo que, ENFE puede recaudar 3,5 millones de dólares por la venta de 3.926 toneladas.
DATOS
Datos de la historia y la salida al mar. La vía férrea retirada fue construida con la compensación económica por el conflicto marítimo con Chile. La red se emplazó durante 30 años para suplir la falta de una salida al mar.
Buscarril. Este medio de transporte, que recorría 220 kilómetros, pasaba por Tarata, Cliza, San Francisco, Anzaldo, Sacabamba, La Cumbre, Sivingani, Vila Vila, Pajcha, Chaguarani, Tin Tin, Mizque y finalmente Aiquile.
Transporte y tren en Cochabamba. Cochabamba contó con un sistema ferroviario hasta 1994, cuando comenzó a decaer. Por este motivo, con el fin de revitalizarlo se decidió dar lugar a la Capitalización y el sistema vial pasó de la Empresa Nacional de Ferrocarriles (ENFE) y a la Empresa Ferroviaria Andina, de capitales chilenos. Pero, dejó de operar.
Rieles desmontados para tren urbano. Los rieles de acero desmontados son 2.500 toneladas, 1.526 de durmientes y 1.800 de durmientes de madera. De esa cantidad, el 20 por ciento es inservible, debido a la oxidación del acero. Otro 30 por ciento puede aprovecharse y venderse como rieles a empresas que operan en las vías férreas en el país. El resto puede ofrecerse como chatarra.
EL BUSCARRIL DEJÓ DE OPERAR HACE TRES MESES TRAS LA REUBICACIÓN DE SU PARADA
El buscarril que operaba la Empresa Ferroviaria Andina (FCA) dejó de funcionar hace tres meses, desde que la Asociación Tunari dio inicio a las obras del tren metropolitano en la antigua estación central de Cochabamba, de donde partía y la FCA tenía sus oficinas.
La empresa tiene la concesión de todo el transporte férreo del departamento, pero debido a la falta de condiciones y básicamente por la falta de una estación, el buscarril no ha podido reanudar su servicio desde enero.
Según informaron fuentes cercanas, la Asociación Tunari debía construir una estación temporal en el kilómetro 6 de la avenida Petrolera, pero a la fecha en el lugar la FCA sólo tiene un container.
El gerente general de la Asociación Tunari, Domingo García, indicó que el 17 de septiembre se entregó una estación temporal y que el buscarril tendría que estar operando con normalidad.
Las empresas de la asociación, JOCA y Molinari, entregaron un container como estación temporal.
“No hay excusas para que no esté operando, el container tiene todos los elementos y servicios básicos para su funcionamiento”, indicó el funcionario a cargo del tramo del tren metropolitano, Rodrigo Hinojosa. La FCA espera reponer el servicio en abril.
Este medio de transporte partía de la estación central y recorría 220 kilómetros. Llevaba hasta 30 pasajeros.
