Padres abandonan a tres niños en el CRIN del hospital infantil
Con sólo 11 meses de edad, una niña con discapacidad visual y desnutrición, fue abandonada por sus padres en el Centro de Rehabilitación Integral Nutricional (CRIN), del Hospital Manuel Ascencio Villarroel. Sin un padre ni una madre que la acompañe, el plantel médico y los voluntarios mostraron su apoyo con la paciente y tras semanas de tratamiento logró recomponerse. Sin embargo, aún permanece en el centro recibiendo la atención necesaria.
Por el CRI pasan al año al menos 50 niños menores de cinco años. Sus historias son comunes: descuidos durante el embarazo que ocasionan cuadros de desnutrición hasta malformaciones congénitas. El centro atiende a los niños de manera oportuna, sin embargo, muchos padres los abandonan temporal o definitivamente una vez que son internados.
“Los niños que llegan aquí son un reflejo de que la problemática social del descuido, abandono y malos hábitos durante el embarazo pueden ocasionar consecuencias graves en la salud de los niños”, sostuvo el jefe médico del CRI, Ricardo Sevilla. Apuntó que los pacientes reciben aportes calóricos y proteicos durante su estadía. Su recuperación puede durar hasta tres semanas. En casos severos este tiempo aumenta.
“Existen diferentes tipos de abandono, algunos de manera temporal cuando dejan a los niños meses, porque los padres viven fuera del radio urbano y luego vuelven, pero también hay definitivos que al ver el cuadro crítico de sus hijos prefieren dejarlos”, dijo una voluntaria de las Damas de Rosado, Soledad Vargas.
Médicos y voluntarios coinciden en que las causas del abandono se centran básicamente en los escasos recursos económicos de los padres, inestabilidad en la pareja, entre otros.
Además, se informó que el 90 por ciento de los niños recibe sólo atención de la madre y no así del padre.
“Por lo menos este año, tuvimos tres casos de niños que sufrieron abandono, esta es una consecuencia del más de 50 por ciento de embarazos que son accidentales”, dijo Sevilla.
Bajo este panorama, el centro opta por la prevención de la desnutrición a través de la consolidación de buenos hábitos durante el embarazo.
LOS HÁBITOS DE LA MADRE INFLUYEN
El jefe médico del Centro de Rehabilitación Integral Nutricional (CRIN), Ricardo Sevilla, explicó que los malos hábitos durante el embarazo generan graves consecuencias en la salud del niño.
“Se sabe por conocimiento de epigenética que las células de una madre que no desea el embarazo, que no se alimenta bien, mandan directamente mensajes a la célula del hijo y esto va influir en el crecimiento y desarrollo y por eso son tan importantes los hábitos desde la etapa intrauterina”, detalló.
Sevilla recalcó que la problemática social del descuido durante el embarazo genera consecuencias en la salud del niño.
“El sistema de salud debe combatir este problema desde que la madre está en el embarazo, fortaleciendo la educación de los buenos hábitos y el de dar un seguimiento hasta los cinco años del niño”, comentó el médico especialista.