Señales de alerta para saber si un menor sufre violencia
Los casos de abuso sexual infantil en nuestro departamento van en ascenso. Pese a ello, la sociedad aún no se abre para hablar del tema. Por esta razón, expertas hacen recomendaciones a los padres de familia para que estén alerta ante un posible caso de abuso o violencia sexual.
La psicóloga Mabel Fernández indica que existen cinco señales de alerta que deben tomar en cuenta los padres de familia para detectar si su hijo o algún menor cercano está siendo víctima de este tipo de violencia.
“Si un niño o adolescente es víctima de abuso sexual, existen señales que nos permiten identificar que algo está pasando. Estas señales variarán de acuerdo a la edad de la víctima y serán diferentes de acuerdo a las características personales de cada niño”, refirió la profesional.
Los menores que son o fueron víctimas de abuso sexual suelen realizar, entre sus juegos, representaciones de situaciones sexuales; retroceden en su desarrollo llegando a orinar en la cama y no contener la emisión de heces; muestran hipersexualización o autoerotismo; sus conductas sexuales no son adecuadas a su edad; tienen cambios de humor repentino, llanto o enojo explosivo; además de mostrar ansiedad cuando deben dirigirse hacia una persona adulta.
“Se debe tener en cuenta que el abuso sexual por lo general no ocurre de la noche a la mañana, sino que es un proceso relacional, por lo que se va dando poco a poco. El agresor, en la mayoría de los casos, es alguien del entorno de la víctima”, explicó Fernandez.
Todos los niños son vulnerables, pero existen situaciones que elevan el riesgo de sufrir abuso sexual: si el menor se queda al cuidado de personas que no son sus padres, la ausencia de educación sexual, la ausencia de los padres y la necesidad de afecto o atención, la presencia de una nueva pareja de uno de los padres, algún tipo de discapacidad, consumo de drogas y alcohol en el entorno social del menor y la falta de comunicación en la familia.
Es necesario que “una víctima de abuso sexual reciba terapia psicológica, puesto que de esto dependerá no sólo su recuperación, sino también definirá su historia familiar, ya que una persona que no ha recibido terapia psicológica tiene dificultades para ver estas señales en una situación futura que pueda presentarse con sus propios hijos o hijas”, recomendó la psicóloga.
VARIOS CASOS SE DAN DENTRO DE LA FAMILIA
El último caso que causó alarma en Cochabamba es el de Gonzalo R. O. (44), acusado de la presunta violación. Entre las víctimas se encuentran sus hijos y sobrinos.
“Yo tenía seis años y él 17 cuando abusó de mí”, confesó una de las afectadas, que actualmente vive en el extranjero.
“Cuando ingresó a nuestra familia, él ya estaba enfermo porque desde que era joven ya agredía sexualmente a niños y niñas pequeños”, dijo una de las cuñadas del agresor.
Gonzalo R. O. se encuentra recluido en el penal de El Abra desde junio de 2018, acusado por el delito de violación a infante, niño, niña y adolescente.
“Cuánto siempre puede ser la pena por violar a un niño”, vociferó mientras los policías lo enmanillaban para trasladarlo al centro penitenciario.
FELCV RECIBE 9 DENUNCIAS DE VIOLACIÓN POR MES
REDACCIÓN CENTRAL
El director interino de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv), Elmer Villca, informó que entre el 1 de enero y el 31 de octubre, en todo el departamento de Cochabamba se registraron 63 casos de agresión sexual.
En su mayoría, los casos de violaciones sexuales se dan en el entorno familiar y los agresores son identificados como los tíos, hermanos, padrastros o personas allegadas a la familia de la víctima.
Villca exhorta a las víctimas de violencia sexual, o a las personas que tengan conocimiento de un caso, a sentar denuncia en la Felcv para realizar la investigación correspondiente.
“Si no quieren dar su identidad, pueden hacer la denuncia de manera anónima y nosotros iniciaremos la investigación”, señaló Villca.