Acuerdo TPP provoca críticas del aislamiento comercial estadounidense
Un esfuerzo durante el fin de semana por parte de las restantes 11 naciones del Pacífico para seguir adelante con el amplio acuerdo comercial regional sin Estados Unidos ha provocado nuevas críticas de que la política comercial de “Estados Unidos Primero” de Donald Trump está dejando a Washington cada vez más aislado.
Los 11 miembros que permanecen en el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés), que el Gobierno de Barack Obama pasó años negociando y del que Trump se retiró en su tercer día en el cargo, anunciaron el sábado pasado que habían llegado a un acuerdo sobre los “elementos centrales” de un acuerdo para proceder sin Estados Unidos.
El grupo aún tiene trabajo por hacer, ya que Canadá, Malasia y Vietnam buscan cambios a un acuerdo que han renombrado (a solicitud de Canadá) como el Acuerdo Global y Progresivo para la Asociación Transpacífico.
Pero los funcionarios dijeron que el plan era firmar un acuerdo final a principios del próximo año, en un trato que eliminaría los aranceles sobre el 95 por ciento de los bienes comercializados en un bloque que cubre a 500 millones de personas y más de 10 billones en producción económica.
“Esto enviará un mensaje muy fuerte a Estados Unidos y a otros países de Asia-Pacífico”, dijo Toshimitsu Motegi, el ministro de economía japonés.
El anuncio se produjo mientras Trump seguía promoviendo la revisión de la relación comercial de Estados Unidos con países de Asia a través de acuerdos comerciales bilaterales y presionando para que se implemente una nueva estrategia “Indo-Pacífica”.
Durante una reunión de fin de semana con su homólogo vietnamita, el Presidente estadounidense se quejó de “un desequilibrio comercial muy importante con Vietnam”.
“Queremos arreglar esto muy rápido”, dijo Trump. Sin embargo, una declaración conjunta emitida el domingo después de la reunión pareció indicar logros limitados para Estados Unidos.
El Presidente y la Casa Blanca señalaron la forma en que se había celebrado su viaje a Asia en China, Japón y otras escalas en el camino, pero los críticos sostienen que, al menos en lo que respecta al comercio, parece que la administración está siendo superada cada vez más por Beijing y otros.
“Creo que todos fueron amables con él y quieren hacerle creer que son amables y que están dispuestos a colaborar con él”. “Pero creo que de alguna manera se están riendo a sus espaldas. Al menos, los chinos lo están”, dijo un miembro del cabildo de los negocios de Estados Unidos al Financial Times el domingo. “No creo que ninguno de ellos tenga la intención de llegar a un acuerdo con él, al menos, no en los términos que él quiere”.
Michael Froman, quien dirigió las negociaciones estadounidenses del TPP durante la administración Obama, dijo que el renovado acuerdo TPP “muestra cómo nuestros aliados y socios continúan viendo el valor de establecer altos estándares y derribar las barreras comerciales en toda la región. Claramente, mientras Estados Unidos retrocede, el resto del mundo avanza”.
“Este Gobierno ha pasado casi un año titubeando y todavía carece de una estrategia seria para tratar con Asia para abrir esos mercados a las exportaciones de bienes y servicios estadounidenses”, dijo Ron Wyden, el principal demócrata del influyente Comité de Finanzas del Senado. “Debido a la falta de compromiso y participación, los agricultores, ganaderos, fabricantes y proveedores de servicios estadounidenses perderán negocios en los mercados de Asia-Pacífico”.
Matthew Goodman, quien se ha desempeñado como principal asesor de economía asiática tanto para presidentes republicanos como para demócratas, dijo que las buenas noticias sobre el hecho de que los miembros restantes del TPP sigan avanzando era que se pondrían en vigor nuevas reglas para regular las empresas estatales y los flujos de datos gratuitos. También dejó la puerta abierta a que Estados Unidos se reincorpore al acuerdo algún día.
