Unilever invierte $us 20 millones y lanza detergente ecológico

La compañía multinacional Unilever celebra este año su cuarto de siglo de permanencia en Bolivia, con el anuncio de la extraordinaria inversión de 20 millones de dólares, la recepción del reconocimiento como “Empresa Boliviana del Año” y el firme objetivo de darse a conocer más en Bolivia.

Fernando Ciarrocca, profesional llegado de Argentina para ser posesionado este año como director nacional de la empresa, declara su primera sorpresa en este sentido al descubrir que Unilever no es una marca tan conocida a nivel nacional como lo es a nivel internacional, pese a su gran compromiso social y ambiental en el mundo y pese también a que muchos de sus productos gozan de bastante prestigio en el mercado boliviano, tales como el champú Sedal y los detergentes Omo, Surf, Skip y el recientemente relanzado ABC. Mucha gente cree que estos productos se fabrican fuera, reconoce Ciarrocca, cuando en realidad se producen en la planta donde antes estaba la ex-Quimbol (kilómetro 10 de la avenida Blanco Galindo).

“Tenemos los únicos detergentes que se producen en Bolivia. Son productos nacionales que dan trabajo a manos bolivianas”, explica Ciarrocca. De hecho, se generan más de 130 empleos en la planta y más de mil en todo el país, sin contar con los 3 mil empleos indirectos.

Unilever también es propietaria de productos elaborados en países vecinos, como los alimentos Maizena, Ri-k, Knorr, Hellamnn’s, o los de aseo personal Rexona, Axe, Pepsodent, sólo por mencionar algunas de las más de 400 marcas que se producen en más de 100 países del mundo.

Por ello, según explica el Gerente General, los anunciados 20 millones de dólares serán invertidos en la mencionada planta, pero también para fortalecer los centros de distribución en Quillacollo, Santa Cruz y El Alto, además de dar a conocer más la marca Unilever. “El objetivo es ser reconocidos entre las tres empresas más grandes del país”, resume Ciarroca.

“He recorrido todo el país para conocer Bolivia. He visto que algunos de nuestros productos son más conocidos en occidente, otros en riente”, explica el Gerente.

Por ello, como parte de su cruzada de acercarse más a la población y, además, de relanzar ABC, Unilever anuncia también la próxima puesta en el mercado de Omo Fácil Enjuague que consume la mitad de agua en el enjuague con respecto a otras marcas. Según explica Cerriocca, este producto fue gestado y elaborado en Bolivia, tras la toma de conciencia de la falta de agua en la región y el compromiso ambiental de la empresa. Ahora, según Ciarrocca, la fórmula se está produciendo en otros países de la región, pero destaca que el origen fue Bolivia.

De hecho, actualmente se exportan los productos fabricados en Bolivia por 12 millones de dólares al año, sobre todo a Paraguay y Perú. Del otro lado, se importan alimentos, de Brasil y Argentina.

En estas circunstancias y con más de una veintena de reconocimientos en vitrinas, Unilever cumple 25 años en Bolivia.

PRODUCE 30 MIL T DE DETERGENTE AL AÑO

Unilever produce cerca de 30 mil toneladas de detergente al año y cerca de mil de champú en el mismo período, en su planta de Piñami, en Quillacollo.

Para llevar adelante esta producción, aplica un riguroso control de calidad e inocuidad del producto, además de seguridad industrial y bienestar de los trabajadores.

En el proceso, se realiza un control de calidad con muestras cada media hora. También se cuenta con un sistema de pesaje que devuelve los envases que tengan menor cantidad a lo informado en la etiqueta.

OBRAS SOCIALES ACERCÁNDOSE MÁS A LA POBLACIÓN

Unilever seccionó tres maternidades en La Paz y una El Alto, dos en Santa Cruz y una en Cochabamba, donde ayuda a madres primerizas enseñando los cuidados del bebé, programas de vacunación y facilitando material de higiene.

Con la marca Rexona, Unilever auspicia a tres atletas nacionales, Karen Tórrez, Bruno Rojas y José Quintanilla, a quienes se les facilitan centros de alto rendimiento, equipamiento y costos de viajes. El objetivo es que lleguen a participar de las Olimpiadas de Tokio 2020.

También realiza campañas de educación en las escuelas para enseñar a los niños las ventajas en la salud mediante el lavado de manos.

A nivel mundial, la Fundación Unilever participa en casi todo los objetivos sociales de Unicef.