Clientela en comercios del valle alto cae 50% por problemas en vía
A julio de 2018, las obras de la doble vía al valle alto presentan un avance global de 75 por ciento, lo que provoca malestar en los propietarios de los restaurantes y comercios de la zona que calificaron las tareas como “intermitentes”. Los trabajos provocaron una caída de hasta el 50 por ciento de sus clientes por las tareas “abandonadas” en diferentes sectores de la carretera.
Paralelamente, los dueños de los inmuebles consultados ayer por Los Tiempos advirtieron que existe falta de información para ceder terrenos para liberación de derecho de vía, por lo que desconocen si sus propiedades deben percibir una indemnización
Los dueños de los restaurantes indicaron que atendían hasta 100 personas en promedio durante los fines de semana. La cifra cayó hasta los 50 comensales desde 2017.
“Ya no se puede hablar de un buen día. Antes teníamos hasta 150 clientes por día, buenos ingresos; ahora, con suerte, 30”, explicó el propietario del restaurante Las Carmelitas, Jaime Mendoza.
Durante un recorrido realizado ayer por este medio, se observó la presencia de maquinaria desde el inicio del tramo, a la altura del progresivo 0,300 de la avenida Petrolera.
En el lugar se realizaban tareas topográficas para su posterior relleno.
El gerente regional de la ABC Cochabamba, Mauricio Moreno, aclaró que desplegó un equipo de profesionales para analizar las condiciones que determinarán la compensación por derecho de vía.
“Verifican que toda la documentación de las personas, cumpla con todos los aspectos requeridos, para finalmente aprobar dicha información que posteriormente pasa al proceso de pago”, precisó Moreno.
A la altura del kilómetro 9, la empleada de una ferretería explicó que las obras de canalización se iniciaron en la zona en abril y afectaron la afluencia de clientes por las dificultades de acceso.
“No avanzan mucho, hemos hecho conocer que también pasan muchos accidentes en estos lugares. También pedimos que si podrían rellenar un poco más, pero tampoco nos han respondido”, afirmó.
A la altura del km 9,5 de la avenida Petrolera existen varios comercios y propiedades afectadas por el derecho de vía de 25 metros que requiere la Administradora Boliviana de Carretera (ABC). Sin embargo, los vecinos evitaron precisar detalles por temor a ser tildados de “problemáticos”.
La situación se repite en el km 10,5 de la misma ruta. “Nosotros tenemos que estar dentro de los 25 metros desde la carretera. La ABC no nos vino a avisar nada que iba a hacer la obras, directamente llegaron y empezaron a cavar”, sostuvo la dueña de una tienda, Marlene Torres.
Añadió que el personal de la ABC solicitó a los vecinos de la zona que tienen su propiedad por encima de los 25 metros retroceder y asumir los costos de demolición de la infraestructura de sus propiedades.
“Hay mucha gente que no sabe que hay indemnización y pasan por alto, y se recorren porque les obligan y no pagan indemnización”, dijo Torres.
Mientras tanto, la dueña de un restaurante del km 15 de la carretera, Celia Fernández, explicó que la ABC le exigió retroceder cinco metros y derribar parte del patio delantero de su casa.
“No me dijeron si me van devolver el dinero cuando saque este techo”, explicó.
Por otra parte, Moreno detalló que se identificaron 123 afectaciones, de las cuales el 61 por ciento se encuentra en proceso indemnización, mientras que el 39 restante está en etapa de revisión.
Indicó la carretera debería entregarse el próximo 3 de septiembre, pero se evalúa una modificación a la fecha de entrega, argumentando que se analiza una evaluación de proyectos compensables. Entre las obras complementarias destacó la construcción de alcantarillas, puentes, cunetas y clocado de asfalto.
TESTIMONIOS
"Han dejado de venir los clientes porque con todo el trabajo que hacen se genera mucho polvo y es difícil entrar. Estas obras nos han afectado a todos los comerciantes de la zona". Abelina Fernández. Dueña de un restaurante
"Todo el tiempo que han cavado he tenido que cerrar. Ya son unos seis meses, recién abrí en julio, porque no había gente que llegue. De 100 personas en sábado, ahora ni 30 o 40 hay". Celia Fernández. Dueña de restaurante