El desplome de la moneda argentina y los posibles efectos en Bolivia
Argentina vivió ayer un día muy tenso. Su moneda local cayó a 39,87 por dólar, una depreciación de 13,52 por ciento ante la moneda extranjera.
Ante el panorama, el Banco Central vendió 300 millones de dólares con la intención de disminuir la demanda y que ello frene la escalada.
El gobierno de Mauricio Macri negó que Argentina esté sufriendo "un fracaso económico" y atribuyó la crisis cambiaria a vulnerabilidades internas y turbulencias externas, mientras se comprometió a avanzar en cambios estructurales del país.
Sin embargo, los titulares de "La subida del dólar alcanza un nuevo récord en Argentina", se repiten en los medios de comunicación en las últimas semanas y meses. La incertidumbre en el país vecino aumenta al no saber cuál será el tope al que llegará el dólar.
Aunque el peso viene cayendo desde diciembre, semana se fue al piso. El pasado miércoles la moneda había caído 6,99 por ciento, en una de las peores jornadas del mercado cambiario este año, justo después de que Macri anunció que el Fondo Monetario Internacional (FMI) adelantará desembolsos del programa de auxilio por 50.000 millones de dólares que pactó a tres años en junio.
En medio de toda esta tormenta cambiaria que está atravesando Argentina, los expertos señalan que son los bolsillos de los ciudadanos los que se ven visiblemente afectados.
Cuando crece el valor del dólar también suben considerablemente los precios de productos básicos, incluso en los alimentos. Los especialistas explican que este fenómeno es común en Latinoamérica, pero Argentina tiene una tasa del traspaso de la devaluación a la 'inflación' particularmente alta.
Los productos argentinos que utilicen insumos importados y pagados en dólares son los que inmediatamente subirán de precio, porque en la etapa anterior a la venta se tuvo que utilizar la moneda extranjera, que termina inflando el precio final.
En el contexto regional, la situación de Argentina repercute también en la economía de los demás países, sobre todo con los limítrofes que tienen un vínculo comercial más estrecho.
“En la medida que el peso argentino se vaya devaluando va a empezar a jalar a otras monedas de la región, sobre todo en el de sus socios comerciales”, indica el al economista boliviano José Gabriel Espinoza.
Brasil es el principal socio comercial de Argentina tanto en importaciones como exportaciones. Asimismo países como Chile, Bolivia, Paraguay y Uruguay tienen preponderancia muy importante.
¿Cómo afecta a Bolivia?
En el caso de Bolivia, los anteriores desplomes del peso argentino ya han venido afectando las actividades comerciales en las poblaciones fronterizas de Yacuiba y Bermejo.
Espinoza indicó que la situación de Argentina afectaría a los principales vínculos comerciales que tiene Bolivia, caracterizado principalmente con la venta del gas.
“Se tiene un fuerte flujo de remesas, que aunque en los últimos años se ha reducido, sigue siendo una fuente importante de ingresos para muchas familias de Bolivia y que a medida que la situación cambiaria en Argentina se vaya deteriorando irá bajando”, explica.
Esta crisis está generando presiones para que exista un el arbitraje cambiario y evitar el ingreso de dólares de otros países. “Hoy en día el negocio en Villazón, Bermejo no pasa por el intercambio de productos, sino pasa por llevar dólares de Bolivia hacia el lado argentino", dice el economista.
La subida del valor del dólar en Argentina produce que incremente el flujo de ingreso de la moneda norteamericana desde Bolivia. “Esto está ocasionando una perdidas de reservas en Bolivia y el Banco Central. El Ministerio de Economía debería tener un pronunciamiento urgente”, añade el experto.