Franquicias internacionales temen competir con oferta culinaria criolla
Mientras la densidad poblacional y los altos niveles de consumo en Santa Cruz y La Paz son las características que atraen a las franquicias internacionales, la enraizada cultura tradicional gastronómica cochabambina se convierte en el principal impedimento para que se consoliden en el mercado local.
En Bolivia hay más de 200 franquicias, de las cuales más del 60 por ciento son internacionales y la mayoría está en Santa Cruz, según el presidente de la Cámara Boliviana de Franquicias (Cafran), Alfredo Troche. No obstante, gran parte de estas empresas internacionales cuentan con planes de expansión a corto y mediano plazo.
Es el caso de la cadena de restaurantes estadounidense Hooters que desde hace un año y medio se encuentra en Santa Cruz. Sin embargo, dentro de sus planes en 2019 está la expansión a la ciudad de La Paz y Cochabamba.
La cadena prefirió consolidarse primero en Santa Cruz, antes que en el resto de las ciudades del país como resultado de un estudio de mercado que cualificó a la capital cruceña como la región con mayor movimiento económico y mayor número de turistas.
Una similar situación ocurre en Telepizza, una franquicia española especializada en la venta de pizza a domicilio que llegó a Santa Cruz hace al menos cuatro años. Según Mauricio Pinto, responsable de marketing, la apertura del Ventura Mall, el centro comercial más grande del país inaugurado en enero de 2014, fue el espacio de aterrizaje para muchas franquicias que apostaron por invertir en esa ciudad.
“Hay un mayor porcentaje de gente que sale a comer afuera de su casa en Santa Cruz”, agregó. Sin embargo, Pinto anunció que Telepizza tiene un plan de expansión a partir del 2019 con “tiendas propias o con la venta de franquicias a La Paz y Cochabamba”.
Troche considera que el sector de franquicias en Bolivia se encuentra en pleno crecimiento y expansión, puesto que indicadores macroeconómicos como el crecimiento sostenido del Producto Interno Bruto (PIB) convierten al país en un atractivo para los inversionistas extranjeros.
El empresario también afirma que las franquicias optan por llegar primeramente a Santa Cruz y cuando éstas ganan experiencia en el mercado se expanden hacia ciudades como La Paz y Cochabamba.
Sin embargo, el presidente de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), Javier Bellot, sostiene que uno de los factores que deriva en la menor cantidad de franquicias en Cochabamba es el consumo de la gastronomía local.
Bellot explica que la dieta cochabambina representa una fuerte competencia para las franquicias de este rubro. “Cómo vas a competir con un mercado que está prácticamente muy enraizado en temas de orden local”, dijo.
No obstante, el presidente de la FEPC señala que la preferencia de consumo de Cochabamba es un factor positivo porque permite conservar los valores identitarios, además del crecimiento y expansión de franquicias locales antes que las internacionales.
A manera de ejemplo, Bellot señala que en Cochabamba Burger King se mantiene con un solo punto de venta, mientras que Panchita no solamente ha creado sucursales en ciudad sino también a nivel nacional. “Entonces eso está dando un indicador muy importante: cuál es la preferencia del mercado cochabambino”, dijo.
Recientemente,la empresa Bolivian Foods, representante de Burger King en el país, invirtió 900.000 dólares en su nuevo restaurante (el octavo) en la ciudad de Santa Cruz.
"Cuando los inversionistas llegan a Bolivia se ha visto un freno en sus expectativas porque de pronto invierten fuerte, pero el mercado reacciona lento. Es por eso que muchas inversiones no están a la par de sus planes de desarrollo". Alfredo Troche. Presidente de Cafran
DATOS
La coyuntura política es un problema en Bolivia. Según el presidente de la Cámara Boliviana de Franquicias (Cafran), Alfredo Troche, la coyuntura política del país complica el ambiente laboral de las empresas y frena la inversión.
Los costos laborales son muy elevados. La carga laboral en Bolivia es muy elevada, por lo que las empresas internacionales no ven incentivos y normas que acompañen el esfuerzo de las firmas del rubro.
Panchita tiene más de 30 años en el mercado. La empresa se expandió en Cochabamba y en varios departamentos del país.
EMPRESAS COCHABAMBINAS TIENEN ÉXITO A NIVEL NACIONAL
Cochabamba se caracteriza como una región que alberga un importante potencial gastronómico y prueba de ello es la expansión de franquicias locales al resto del país.
Para reforzar esta afirmación, el presidente de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), Javier Bellot, señala que las empanadas Wist’upiku no solamente están en las principales capitales de Bolivia sino que también han llegado a Estados Unidos.
Según Bellot, la expansión de otras ofertas de alimentos como Panchita y Empanadas Paula es un indicador de que en Cochabamba se están gestando nuevos conceptos gastronómicos, ya que la población, culturalmente, está configurada para consumir la oferta local.
“Eso es bueno, porque muchos nos podrán criticar de nacionalistas, pero no es un tema de nacionalismo, sino de que los efectos multiplicadores son positivos como por ejemplo en el campo agrícola, pecuario, consumo, mano de obra local, además de desarrollo de estrategias locales en las que empiezas a involucrar a actores locales”, afirmó.
El presidente de la Cámara Boliviana de Franquicias (Cafran), Alfredo Troche por su parte, menciona que Cochabamba ha sido el lugar de ingreso de algunas franquicias internacionales, como el caso de TGI Fridays, que luego de permanecer un tiempo en Cochabamba recién decidió expandirse a Santa Cruz.
Troche menciona también que Cochabamba es, en ocasiones, el principal mercado de expansión para algunas franquicias nacionales como Casa del Camba o Vaca Fría, que llegaron primero al departamento y posteriormente a La Paz.
