Una mujer lidera ahora la división de Servicio Técnico en Imcruz
Cuando uno habla de “servicio técnico automotriz” se imagina overoles, tuercas, gatas, llaves cresent, aceite, gomas y hasta grasa y suciedad. ¡Pero no!, es mucho más que eso y es un rubro fascinante. Así lo asume Ericka Herbas Navia, flamante jefa del Taller Express de Imcruz en Cochabamba, la única mujer que accedió hasta ahora a un puesto de esta envergadura.
“La mecánica automotriz no sólo es un trabajo duro donde uno se ensucia y sólo necesita fuerza; es una mecánica tan compleja que se requiere personas especializadas para diagnosticar fallas y solucionar problemas cada vez más complejos porque la tecnología evoluciona. Y para eso se requiere capacitación, inteligencia y conocimiento”, afirma esta joven profesional que ingresó a Imcruz primero como pasante, comenta el gerente de la empresa en esta ciudad, Rolando Torrejón.
Cerca a cumplir los seis meses en el cargo, “ella era la encargada de repuestos, e hizo un excelente trabajo. Por eso se decidió apostar para que se haga cargo de un taller”, prosigue Torrejón.
Ella describe su trabajo como intenso y exigente. El personal de la sección a su cargo está compuesto por seis mecánicos, un electricista, dos chaperos y un jefe de Mecánica. En total 10, todos varones. “En recepción hay dos asesores varones y una cajera mujer. El resto son de empresas terciarizadas: los lavadores de autos que son tres varones, la señora de limpieza que es mujer, el guardia que es hombre y la encargada de repuestos que también es mujer”.
De pasante a jefa
La historia laboral de esta ingeniera y técnica es la de una serie de ascensos sostenidos, consecuentes a un inicio común: la pasantía.
“Comencé en Industrias Luján haciendo mi trabajo dirigido en Sistemas de Gestión de Calidad y Medio Ambiente, para titularme como ingeniera industrial. Después me contrataron como jefa de Aseguramiento de Calidad y luego, cuando mi tutor dejó el cargo como responsable del Sistema Integrado de Gestión, asumí ambas funciones. Tenía el reto de enfrentar la auditoría de certificación, a los dos meses de asumir ese cargo, y aprobamos”, cuenta. Al año siguiente recertificaron, pero luego optó por retirarse para alcanzar nuevas metas, entre ellas estudiar Mecánica Automotriz, “en principio porque quería emprender un negocio propio, pero el destino me trajo a Imcruz, que me abre más sueños”, dice.
Tras terminar la carrera de Mecánica, debía realizar pasantías. “Mandé mi currículum a Imcruz y el señor José Rodríguez me dio la bienvenida; la idea de tener a una ingeniera que estudiara Mecánica lo impulsó —cree— a darle la oportunidad, como lo hizo con otras personas en las que vio potencial”, dice.
A los seis meses de la pasantía, postuló a la convocatoria para auxiliar de almacén, e ingresó oficialmente a Imcruz. Al año siguiente ascendió a encargada de almacén. Y un año más tarde (en noviembre de 2018) se abrió la vacante para jefe del Taller Express, “donde ingresan de 20 a 30 autos al día”.
Imcruz, una empresa con mirada de mujer
En Imcruz hay varias féminas en altos cargos. En el área de ventas, la jefa de uno de los salones más grandes de Cochabamba es Drina Rivero y tiene como líder a María Inés Carrasco, gerente nacional de Retail. En su taller, Imcruz emplea hoy a varias mujeres. Y, aunque Ericka fue la primera pasante mujer en Mecánica, antes, Beatriz Morales (una experta en chapería) fue promovida a encargada de control de calidad en Chapería.
La empresa Imcruz cuenta también con otras tres mujeres que se desarrollan en el área de repuestos: Gladys, Jandira y Laura, además de varias otras dedicadas al sector administrativo.
“En Imcruz se reconoce el talento, no el género. Es por eso que hay tantas líderes mujeres como varones”, afirma Ericka.
“Lo más difícil es demostrar que uno sabe. Porque muchas veces las personas creen que una mujer no sabe mucho de autos, ése es el preconcepto común. Entonces, una vez que una empieza a hablar y a demostrar conocimiento, es ahí cuando el cliente se da cuenta y siente la seguridad de que su vehículo está en buenas manos”.
Los servicios más buscados son, dice: mantenimientos preventivos programados, asegurado de partes, biselado de retrovisores, chapería y mantenimientos correctivos. La mayoría son trabajos exprés; los vehículos no se quedan mucho tiempo en este taller.
30 coches al día van a Imcruz por servicio técnico, consultas, evaluaciones y otros al Departamento Técnico.
LOS DESAFÍOS
Mujeres y trabajo pesado. “Las mujeres somos muy eficientes y podemos realizar cualquier tipo de actividad, porque no se necesita fuerza, sino inteligencia. Las herramientas sobran para facilitar o ayudarnos a realizar trabajos pesados que requieren de mayor fuerza; lo importante es la inteligencia para poder utilizar estas herramientas de forma correcta”.
Cambio de mentalidades. “Las personas cambiamos; hoy el trabajo de una mujer suele ser muy detallista y la gente a veces confía más en nosotras”.
UNA DE LOS “DEALERS” CON MÁS MOVIMIENTO
- Imcruz tiene al rededor de 800 trabajadores a nivel nacional.
- Las marcas que comercializa son seis: Suzuki, Mazda, Renault, Chevrolet, Changan y Jac.
- Importan también camiones, maquinaria, motos, repuestos y llantas.
- Tienen sucursales en todo Bolivia, excepto en Pando. La región con más ventas es el eje troncal, y Santa Cruz es el departamento con más ventas.
- Su marca estrella es Suzuki.
FICHA PERSONAL
Erika Fabiola Herbas
Fecha y lugar de nacimiento: 28 de febrero de 1988, Cochabamba
Profesión: Ingeniera industrial, de la UMSS, y técnico superior de Mecánica Automotriz, de Infocal. “Hice la carrera de Mecánica para especializarme en una área especifica”.
Actividades extralaborales: “Jugaba raqueta, pero ahora con el trabajo no tengo mucho tiempo”.
Historial laboral: Jefa de Taller Express de Imcruz. “Ya estoy por cumplir los cuatro años en la empresa. Anteriormente trabajé en Industrias Luján como jefa de Aseguramiento de Calidad y responsable del Sistema Integral de Gestión”.