Sólo 1 de 7 alcaldías culminó una planta
El servicio de alcantarillado en los municipios de la región metropolitana es menor al 20 por ciento. Sólo Cercado tiene una cobertura del 73 por ciento. En tanto, Tiquipaya, una zona con urbanizaciones residenciales, apenas brinda el servicio a 2.500 usuarios de una población de 53.000 habitantes.
A esto se suma que sólo dos de los siete municipios de la región metropolitana tienen plantas de tratamiento, el resto vierte sus desechos al río Rocha.
El Plan Metropolitano de Agua y Saneamiento Básico determinó que se deben construir 11 plantas en los siete municipios para descontaminar el río Rocha. La falta de servicio impide la ampliación de redes.
El plan señala que entre 2016 y 2036, la cobertura de alcantarillado sanitario se incrementará a 1.038.284 habitantes en los municipios de Cercado, Sacaba, Tiquipaya, Colcapirhua, Quillacollo, Vinto y Sipe Sipe.
Cercado
En el municipio de Cercado, el Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa) tiene 82.264 conexiones de alcantarillado, lo que significa una cobertura del 73 por ciento.
Según el representante de la Federación de Juntas Vecinales (Fedjuve), Eliseo Alejandro, todo el Distrito 9 y parte del 8 no tienen alcantarillado, por lo que la población perfora pozos sépticos o letrinas.
“Por descargar nos cobran 350 bolivianos y se debe hacer dos veces al año, pero además hay riesgo para la salud”, dijo.
El representante explicó que cuando la gente construye su casa en el Distrito 9 lo primero que hace es su letrina.
El plan maestro indica que los municipios no cuentan con datos precisos sobre la dotación del servicio de alcantarillado.
También detalla que las aguas domiciliarias son vertidas directamente a los ríos Maylanco-Rocha y Tamborada, generando un grave problema de contaminación por su uso indiscriminado en la agricultura.
También revela que los municipios no realizan el tratamiento primario adecuado y sólo operan como cámaras de paso.
En Cercado está pendiente la ampliación de la planta de Albarrancho que ha colapsado debido a que su capacidad es para tratar 400 litros por segundo (l/s) pero recibe más de 600.
Ante el colapso no se puede hacer un tratamiento adecuado de las agua negras. Pero para tener un mejor saneamiento se tienen que implementar otras dos plantas en la zona de Valverde y en Uspha Uspha.
Otros municipios
Sólo el municipio de Sacaba logró construir una planta de tratamiento de aguas servidas para 15.000 habitantes y pronto emplazará otra en Pucara.
En cambio, los municipios de Vinto, Tiquipaya y Colcapirhua trabajan proyectos a diseño final que están en revisión en el Ministerio de Medio Ambiente y Agua. Se gestiona financiamiento de la cooperación francesa. El presupuesto será de 10 a 15 millones de bolivianos.
La secretaria de la Madre Tierra, Soledad Delgadillo, pidió a los municipios mayor celeridad para concretar estos proyectos. “Las plantas deben ser una prioridad”, declaró.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 892 millones todavía defecan al aire libre, por ejemplo, en alcantarillas, detrás de arbustos o en masas abiertas de agua.
Se estima que al menos el 10 por ciento de la población mundial consume alimentos regados con aguas residuales.
Un saneamiento deficiente va asociado a la transmisión de enfermedades como el cólera, la diarrea, disentería, hepatitis A, fiebre tifoidea y poliomielitis.
Se estima que el saneamiento deficiente es la causa de 280.000 muertes por diarrea cada año. Las malas condiciones de saneamiento también contribuyen a la malnutrición.
Según el Censo de 2012 del Instituto Nacional de Estadística (INE), en Bolivia el 52,7 por ciento del total de personas empadronadas tienen acceso a saneamiento básico.
Otro problema es la falta de planificación de los servicios, debido a que las redes no tienen la capacidad para las descargas de los edificios.
Falta de supervisión demora ampliación de Albarrancho
La ampliación de la planta de tratamiento de aguas de Albarrancho en Cercado fue adjudicada a la Asociación Accidental Toborochi por 101 millones de bolivianos.
El proyecto será supervisado por la Entidad Ejecutora de Medio Ambiente y Agua (Emagua), pero las obras no inician por falta de una supervisora que debe contratar la Alcaldía.
Albarrancho tiene más de 50 años y ha colapsado debido a que su capacidad es para 400 litros por segundo (l/s), pero actualmente recibe más de 600, por lo que, el servicio es muy deficiente.
La obra debe construirse en 1.095 días calendario. El Gobierno nacional financia el 50 por ciento, la Alcaldía el 40 y la Gobernación el 10.
La ampliación permitirá mitigar los malos olores en la zona y entregar agua apta para el riego de cultivos. Albarrancho tiene más de 50 años de funcionamiento y su ampliación se gestiona hace tres años.
LA SITUACIÓN EN EL VALLE BAJO
COLCAPIRHUA Y QUILLACOLLO
Desechan residuos directamente al río Rocha
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Colcapirhua y Quillacollo tampoco tratan las aguas domiciliarias. Los residuos se vierten al río Rocha. Ambos municipios gestionan la construcción de plantas de tratamiento.
Colcapirhua construirá dos: una, en la zona de Sumunpaya y otra en Esquilán, ambas al sur del municipio. Además, gestiona un financiamiento de 41 millones de bolivianos.
Los vecinos de Esquilan advierten que el terreno que se pretende usar está en jurisdicción de Cercado.
Ambos proyectos son revisados por el Ministerio de Medio Ambiente y Agua y se gestiona el financiamiento, informó el responsable de Saneamiento Básico de ese municipio, Ronald Vidal.
“No tenemos planta de tratamiento sólo algunos colectores donde se separaban sólidos de líquidos, pero los mismos han colapsado y no operan”, dijo.
En cambio, el municipio de Quillacollo requiere un presupuesto de 107 millones de bolivianos para emplazar una planta de tratamiento. El proyecto ha concluido la etapa de estudio de prefactibilidad con apoyo del BID y todavía no tiene terreno definido.
EN VINTO Y SIPE SIPE
Gestionan financiamiento
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En los municipios de Vinto y Sipe Sipe sólo el 25 y 20 por ciento de la población, respectivamente, cuenta con alcantarillado. Se trata específicamente de las zonas urbanas.
El resto de las aguas domiciliarias se descargaban directamente al río, porque los antiguos colectores colapsaron.
Vinto gestiona ante la cooperación francesa un financiamiento de 38 millones de bolivianos para adjudicar el proyecto con la modalidad llave en mano a una empresa.
Además de la planta de tratamiento, la empresa ejecutora debe ampliar las redes y construir colectores primarios, informó el responsable de Saneamiento Básico de la Alcaldía, Carlos Mercado.
El municipio de Sipe Sipe también gestiona ante la cooperación francesa un financiamiento de 15 millones de bolivianos para ampliar su servicio en el centro urbano de Urinsaya, Carreras Pampa, Montecato, Chauarani y Siqui Siquia. El proyecto de construcción también contempla la ampliación del servicio de alcantarillado.
Actualmente, Vinto recibe unos 45 litros de agua por segundo que se echan al río Chaki Mayu.
EL ESTADO EN LOS MUNICIPIOS
SACABA TERMINÓ PRIMERA PLANTA
Contaminación del río Rocha disminuyó en 15%
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Sacaba se convirtió en el primer municipio de la región metropolitana en construir la primera de 11 plantas de tratamiento de aguas domiciliarias.
El sistema que reduce la carga bacteriana, los olores y dota de agua para riego se inauguró en junio en la zona de El Abra. La planta redujo la contaminación del río en 15 por ciento.
Además, se adjudicó la construcción de otra planta en Pucara con un presupuesto de 19,5 millones de bolivianos.
La planta en Pucara tratará 150 litros por segundo y se adjudicó bajo la modalidad llave en mano a la empresa Codelca CBT.
Con la operación de esta planta se descontaminará el río Rocha en un 40 por ciento, informó el gerente de la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Sacaba (Emapas), Óscar Zelada.
El municipio también planea construir otras pequeñas plantas en las zonas de Lava Lava y Chiñata.
La planta de la zona de El Abra puede tratar 130 litros por segundo de aguas servidas y beneficiará a 60 mil habitantes. Fue construida con un presupuesto de 17,5 millones de bolivianos.
PROYECTOS EN CERCADO
En Valverde y Uspha Uspha
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La responsable de la Madre Tierra de la Gobernación, Soledad Delgadillo, explicó que además de la ampliación de la planta de Albarrancho, Semapa tiene que implementar otras en la zona sur.
Una en Valverde para los distritos 2, 3 y 4 de Cercado, ya que las aguas servidas que llegan a la zona sólo se someten a un tratamiento primario y son vertidas al río Rocha. La otra planta se edificará en Uspha Uspha, pero en esta no hay ningún avance.
La planta de Valverde tiene un costo de 99 millones de bolivianos y se gestiona el financiamiento con la cooperación francesa.
El gerente de Semapa, Gamal Serhan, explicó que sólo es necesaria la construcción de la planta de Valverde y desestimó la necesidad de construir otra en Uspha Uspha.
“Nosotros no hemos participado de la elaboración del Plan Maestro de Agua Potable y Saneamiento que indica que se requiere una planta en la zona sur, sí la necesitamos en Valverde”, declaró.
A la zona de Valverde llegan 200 litros de aguas negras por segundo que no reciben un tratamiento adecuado.
TIQUIPAYA DEPENDE DE SEMAPA
El municipio tiene 2.500 conexiones de alcantarillado
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El municipio de Tiquipaya no tiene planta de tratamiento de aguas servidas, cuenta con una población de 53.000 habitantes y sólo 4.700 conexiones de alcantarillado. Sin embargo, sólo la mitad está en operación por un convenio con Semapa que traslada las aguas al canal Valverde, en Cercado, informó el responsable de Saneamiento Básico de ese municipio, Ronald Vidal.
El funcionario explicó que en 2009 tenían un proyecto con la Alcaldía de Colcapirhua para emplazar una planta de tratamiento en la zona sur de ese municipio, sin embargo, la propuesta se descartó por la oposición de pobladores de la zona.
Ahora, el municipio trabaja en el emplazamiento de una planta de tratamiento con un presupuesto de 70 millones de bolivianos que se gestionan ante la cooperación francesa.
“Estamos expropiando dos hectáreas para la construcción de la planta, estamos negociando el precio”, dijo.
Vidal explicó que esperan que esta planta de tratamiento sea financiada en un 50 por ciento por el Gobierno nacional. “Es un proyecto que es necesario y esperamos recibir apoyo”, puntualizó.
