Retoman tren urbano y piden transparentar contratación
Después de la firma de dos contratos en dos años, uno que quedó suspendido y otro que dio un plazo de seis días a las empresas para presentar propuestas, el Gobierno nacional retoma el proyecto de construcción del tren metropolitano de Cochabamba.
El nuevo megaproyecto demanda una inversión de 477,6 millones de dólares, 183 menos que el primer contrato de 630 millones de dólares, 504 para la ejecución y 126 para cubrir el pago de interés del crédito internacional que se gestionaba ante bancos de suiza y Alemania con la garantía del Estado.
El nuevo tren que se proyecta para Cochabamba pretende unir los municipios de Sipe Sipe, Vinto, Quillacollo, Colcapirhua, Cercado y parte de Sacaba a través de una vía en placa, hecha de hormigón, de 42 kilómetros.
Se prevé que el financiamiento sea cubierto por el Tesoro General de la Nación (TGN) y entregar un anticipo del 20 por ciento a las empresas suiza alemana Molinari Rail y la española JOCA, que conformaron la Asociación Accidental Tunari para adjudicarse el megaproyecto.
También está previsto que una consultora internacional revise el proyecto a diseño final del tren metropolitano con un presupuesto a parte.
De acuerdo con el estudio de prefactibilidad, el nuevo medio de locomoción será un tren tipo ligero, una variante del tradicional y del tranvía, que se caracteriza por usar una vía exclusiva y que en otros países se puede fusionar con las vías para los vehículos.
El subgerente del proyecto, Germán Chisaka, afirmó que se requerirá una vía operativa de cuatro metros y dos como franja de seguridad para las tres líneas.
En tanto que el equipo socioambiental trabaja en una consulta pública para los impactos ambientales que se generarán como una exigencia para contar con la licencia ambiental de un proyecto categoría II.
La línea roja recorrerá 5,2 kilómetros y partirá de la estación central hacia la avenida Petrolera hasta la facultad de Agronomía de la UMSS.
La línea Amarrilla abarca 9,8 kilómetros y se prevé que su recorrido comience en la estación central hasta El Castillo, en Sacaba.
La línea verde será la más larga de 27,1 kilómetros y recorrerá gran parte de la antigua red del ferrocarril del valle. Pretende unir Cercado con Sipe Sipe.
Los vecinos del área de influencia conformaron un comité de control social para fiscalizar los trabajos y conocer el grado de afectación que sufrirán sus viviendas con la implementación del nuevo servicio.
El Ministerio de Obras Públicas Servicios y Viviendas, que adjudicó el segundo contrato entre el 26 y 27 de agosto de 2017 a las empresas que en un año no concretaron el financiamiento, sostiene que no se realizará ninguna expropiación.
Pero, en el proceso de contratación se prevé contar con un equipo para la liberación de vía y trabajar con carpetas individuales y en caso de ser necesario recurrir a otras instancias.
Transporte
El desarrollo de Cochabamba ha estado ligado a la modernización del transporte. Primero con el tren al valle, luego con el ferrocarril al occidente y el tranvía.
Tras la desaparición de estos medios de locomoción cobró mayor preponderancia el transporte motorizado, las flotas y camiones reemplazaron poco a poco a los vagones de tren.
Sin embargo, hoy en día los trenes se han fusionado con la vida urbana y en varias capitales son el principal medio de transporte.
En Cochabamba, se realizan 2 millones de viajes al día en transporte público, la mitad de ellos ocurren en la capital.
El tren metropolitano que se pretende construir con 447,6 millones de bolivianos prevé trasladar 70.000 pasajeros entre seis municipios y a través de tres líneas: roja, amarilla y verde.
Después de dos años sin avances,
se prevé ejecutar el megaproyecto en dos fases. En la primera, de cuatro, se realizará el estudio a diseño final y los trabajos previos como el desmontaje de los rieles y durmientes.
Las empresas que se adjudicaron el tren, JOCA de España y Molinari Rail de suiza, han solicitado un anticipo del 20 por ciento para la primera fase y no descartan hacer el mismo pedido para la segunda etapa.
El Ministerio de Obras Públicas contempla concluir el 80 por ciento del tren metropolitano en 2020 con la conclusión de la línea verde de Sipe Sipe a la ciudad.
Ante los cuestionamientos a la falta de transparencia en los dos contratos que se firmaron para el tren metropolitano, el Ministerio de Obras Públicas manifestó que en el primer contrato se busca un crédito conveniente y en el segundo un ahorro con la disminución del pago de intereses.
Los asambleístas de oposición mantienen sus observaciones a la falta de transparencia en las dos adjudicaciones, porque el plazo para que las empresas interesadas en el megaproyecto presenten propuestas fue mínimo.
Ministerio vuelve a adjudicar tren a JOCA
“Entre 2015 y 2017, el Ministerio de Obras Públicas suscribió dos contratos para la construcción del tren metropolitano de Cochabamba. El primero el 12 de septiembre de 2015. El contrato fue adjudicado a la española JOCA a pesar que hasta poco antes se anunciaba que la obra sería construida por la coreana Hyndai Rotem, la única que trabajo en los estudios con la Gobernación, en la gestión de Edmundo Novillo.
La repentina contratación de JOCA se hizo bajo la modalidad Llave en Mano con el cien por ciento de financiamiento del proponente y con un plazo de tres a cinco años de plazo para que el Gobierno comience a pagar el crédito. Sin embargo, al día siguiente de la firma ante las cámaras de los medios y de la población se aplicó una cláusula suspensiva que dejó paralizado el acuerdo hasta que la empresa tenga el proyecto a diseño final y el financiamiento.
En el proceso, JOCA se asoció con Molinari para bajar la tasa de interés de los créditos. Después de más de un año de gestiones el contrato quedó cancelado y el Ministerio de Obras Públicas inició un segundo proceso que otorgó un breve plazo de seis días a 25 empresas para que presenten su propuesta técnica y económica. Sólo la Asociación Tunari, conformada por JOCA y Molinari, presentó en ese plazo una propuesta por 447,6 millones de dólares.
ANTECEDENTES
COCHABAMBA VOLVIÓ A SOÑAR CON EL TREN EN 2015 CON EL PRIMER CONTRATO PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL TREN. SIN EMBARGO, DESPUÉS DE DOS AÑOS SE INICIÓ UNA NUEVA CONTRATACIÓN.
PROYECTO
EN JUNIO DE 2010, EL GOBIERNO DE EVO MORALES RETOMÓ EL PROYECTO DEL TREN URBANO EN COCHABAMBA Y REALIZÓ UNA CONSULTORÍA PARA REHABILITAR LA LÍNEA FÉRREA.
OPINIONES
MARIO ORELLANA
ASAMBLEÍSTA
Aquí hay una caja de pandora que vamos a destapar. Voy a poner mayor empeño para demostrar que aquí se están ocultando cosas en el tema del tren metropolitano.
Tenemos la firme convicción de que se está engañando a los cochabambinos. Vamos a esperar las respuestas a informes, vamos a seguir reclamando y denunciando a la población cochabambina cuantas veces sea necesario.
Nos dicen que denunciemos, pero no soy opa para ir a perder mi tiempo, porque ya sabemos que la Contraloría y el Ministerio Público están controlados por el Gobierno central. Así que yo denunció ante la población.
HENRY PAREDES
EXASAMBLEÍSTA
No es posible que en un proyecto de una obra cuantiosa, el Ministerio, les haya dado a 25 empresas la posibilidad de presentarse en sólo seis días. Y me refiero a este segundo contrato. El tema de la factibilidad es algo que no está claramente definido, los pasajeros, el precio del pasaje y es algo que genera susceptibilidad.
Además, se habla de la generación de 800 empleos, pero la empresa saca un letrero que dice que no va a recibir más currículos. Además, se genera más susceptibilidad, porque en España se rescindió un contrato con un colegio y aquí viene a pedir el 20 por ciento de anticipo de la primera fase.
LIZETH BERAMENDI
ASAMBLEÍSTA
En Cochabamba tenemos otras prioridades. No hay agua en las casas. El Proyecto Misicuni se ha acabado, pero no hay cómo llevar agua a las familias. Se necesitan por lo menos 300 millones de dólares para hacer las aducciones, las redes y los sistemas de riego.
Es una pena que se esté protegiendo al Ministro, que se escapa sin responder preguntas. En Cochabamba no tenemos salud, la gente va a ir en el tren lujoso con estilo europeo a dormir a los hospitales y hacer cola para ser atendida por un médico.
Tenemos otras necesidades y no nos preguntan a los cochabambinos qué queremos.