Los inmigrantes, claves para EEUU y España
Agencias
Los inmigrantes se han convertido las dos últimas décadas en el segmento de población que más ha impulsado el crecimiento económico de algunas ciudades de Estados Unidos y España, según reportes de ambos países, que indican que los residentes extranjeros latinos son un importante motor en cuanto a la creación de negocios, compra y venta de viviendas y depósitos bancarios.
EEUU
La población inmigrante de Estados Unidos ha creado más negocios que los ciudadanos nacidos en el país, según un informe titulado "Un mundo de oportunidades" que publicó ayer el Centro para un Futuro Urbano, dedicado a la investigación sociológica y con sede en la ciudad de los rascacielos.
"Los inmigrantes han sido el motor empresarial de las grandes ciudades, desde Nueva York a Los Ángeles, porque han estimulado el crecimiento en muchos sectores económicos y han revitalizado varias zonas de las ciudades que estaban dormidas", asegura Jonathan Bowles, director del centro.
En 2005, el 0,35 por ciento de la población inmigrante adulta (350 de cada 100.000) creó nuevos negocios cada mes, mientras que sólo el 0,28 por ciento de los estadounidenses hizo lo mismo, en un país que ha visto aumentar su población gracias a los recién llegados.
Entre 1980 y 2000, los inmigrantes supusieron el 97 por ciento del crecimiento demográfico en Los Ángeles, el 101 por ciento en Houston, el 128 por ciento en Nueva York y el 357 por ciento en Boston.
En Los Ángeles, en cuyo condado hay más negocios regentados por asiáticos e hispanos que en cualquier otro lugar de EEUU, al menos 22 de las cien compañías que registraron un crecimiento más rápido en 2005 fueron creadas por inmigrantes de primera generación.
Sin embargo, el impacto del crecimiento de la población inmigrante en la ciudad de Nueva York no es comparable a la de ningún otro lugar de Estados Unidos en los últimos diez o quince años.
"Estos pequeños empresarios son el futuro de Nueva York", reza el informe, que recoge unas cifras que demuestran la aportación de los inmigrantes a la economía local en la creación de puestos de trabajo, el pago de impuestos a la ciudad y la revitalización de áreas olvidadas de algunos distritos.
Bancos y remesadotas tras el inmigrante latino
Las entidades bancarias y las remesadotas buscan cómo atraer a sus oficinas al inmigrante Latinoamericano, que se ha convertido en un cliente potencial clave en la economía española, según miembros del sector que participaron en una mesa redonda en Madrid.
Luis Núñez de Minority indicó que desde 1996 el incremento medio anual de la economía española es del 3,5 por ciento, "expansión que también es consecuencia de los flujos migratorios".
A su vez, los inmigrantes tienen cada vez más facilidades para acceder a los productos financieros y el primer paso lo dan con el envío de parte de los recursos que obtienen en España hacia sus países de origen.
Así, las entidades financieras buscan cómo captar su atención y les ofrecen nuevos productos "hechos a su medida", indicaron los expertos.
Por ello, el Banco Santander compró la remesadora "Latinoenvío", la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) ha establecido acuerdos con bancos en lationamérica, y bancos como el BBVA, han creado una filial para ofrecer nuevos productos.
Las opciones son múltiples pero el objetivo es el mismo: vincular al inmigrante para que se vaya incorporando al mercado del sector bancario.
En cifras
- Según el Banco de España, las remesas de inmigrantes hacia el extranjero alcanzaron los 6.452 millones de dólares en los diez primeros meses de 2006, un incremento del 34,71 por ciento respecto a 2005 que superó por primera vez la barrera de 5.000 millones.
- En estos momentos, los inmigrantes que se deciden por la compra de un inmueble llevan una media de cuatro años en España.
- Los inmigrantes compran 15 de cada cien viviendas en España; es decir cerca de 68.000 viviendas al año, lo que representa el 15 por ciento de la demanda del mercado inmobiliario de ese país.
- El número de inmigrantes que regentaban su propio negocio en Nueva York creció en los años 90 un 53 por ciento, mientras que los empresarios locales disminuyeron un 7 por ciento.
- Tras los atentados del 11-S en 2001 los inmigrantes continuaron creando puestos de trabajo mientras la economía de la ciudad no lograba despegar.