OEA evaluará posible regreso de Honduras dentro de las próximas semanas
WASHINGTON |
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, se mostró hoy optimista sobre el posible regreso de Honduras al organismo interamericano, al afirmar que dentro de las próximas semanas los países miembros tomarán una decisión sobre su futuro.
El líder de la organización calificó de "positivo" y "equilibrado" el informe que la comisión de alto nivel elaboró sobre la situación en Honduras, aunque reconoció que no hubo consenso para emitir una recomendación "inmediata" sobre el levantamiento de la suspensión.
En junio pasado, la comisión de alto nivel enumeró los progresos y los requisitos que aún debe cumplir el Presidente Porfirio Lobo y realizó siete recomendaciones para el eventual regreso de ese país a la OEA, centradas sobre todo en el futuro de Zelaya y los derechos humanos.
"Ciertamente desde el punto de vista de las expectativas muchos esperaban una recomendación concreta sobre si Honduras debe volver o no a la OEA y esa recomendación no está porque no existe aún el suficiente consenso para que esté", explicó Insulza.
Los cancilleres estudiarán ahora el informe y sacarán sus conclusiones y "en base a eso, podremos juntarnos a mediados de mes o una cosa así a conversar sobre hechos ya más concretos y posturas adoptadas por los países", afirmó el ex ministro chileno.
Las primeras reacciones al informe se produjeron ayer, ya que Chile decidió reconocer al Gobierno de Lobo sobre la base de éste.
"Yo creo que Chile ha tomado una buena decisión", señaló Insulza, quien siempre ha abogado por el pronto reintegro de Honduras a la OEA.
El máximo responsable del organismo interamericano consideró que el informe evidencia de manera objetiva y con un gran consenso, que Lobo ha impulsado "cambios importantes" y que ha "avanzado en la dirección correcta", si bien no ha resuelto la situación de Zelaya.
En su informe la comisión recomienda, entre otros puntos, que Lobo ponga fin a los juicios iniciados contra Zelaya y sus colaboradores durante el régimen de facto.
Insulza reconoció que es un tema complejo, pero dijo que mientras nadie defienda la impunidad, "tampoco parece muy razonable que las únicas personas que se pretenda juzgar sea al Presidente Zelaya y a miembros de su Gobierno" por casos que, si bien ocurrieron antes del golpe, fueron formalizados después del derrocamiento.
"Los países quieren ser prudentes y quieren conversar primero entre ellos, tener un diálogo y hacer las cosas con calma para garantizar una Asamblea exitosa", explicó el secretario general.
La OEA suspendió a Honduras en julio de 2009, ante el golpe de Estado que derrocó el 28 de junio de ese año a Manuel Zelaya.
Por decisión de la Asamblea General que se celebró en junio en Lima, la comisión de alto nivel, integrada por Argentina, Bahamas, Belice, Canadá, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Perú y República Dominicana, analizó la situación en Honduras.
La Carta Democrática Interamericana exige el voto favorable de dos tercios de los países miembros para poder levantar la suspensión y Honduras asegura contar con el apoyo de unos 24, el número mínimo necesario para poder retornar a la OEA.