Alan García declara por sobornos sobre Odebrecht
Lima | EFE y AFP
El expresidente peruano Alan García declaró ayer ante la Fiscalía como testigo en uno de los casos de supuesta corrupción que involucran a la empresa Odebrecht “sin temor” a verse involucrado y como contrapunto del fugitivo Alejandro Toledo, en busca y captura por haber recibido coimas de la empresa brasileña.
La comparecencia del exmandatario ante la Fiscalía fue seguida con mucha atención por la prensa local, ante la que García, presidente en los períodos 1985-1990 y 2006-2011, insistió reiteradamente que no tiene miedo alguno a quedar implicado en este escándalo y afirmó hasta la saciedad estar dispuesto a someterse a cualquier convocatoria legal o parlamentaria que lo requiera.
Pese a sus también reiterados mensajes de “no querer dar lecciones a nadie” con su comparecencia, la actitud y los duros mensajes que emitió contra la corrupción estaban directamente dirigidos a reflejar la situación de Toledo, prófugo de la Justicia peruana desde que la semana pasada un juez pidiera su busca y captura por supuestamente haber recibido dinero de Odebrecht para facilitar sus negocios en el país.
Toledo (2001-2006), que se presume está en EEUU, habría recibido 20 millones de dólares para adjudicar a la empresa brasileña la construcción de la carretera Interoceánica, uno de los proyectos de infraestructura más grandes del país.
“(Con la comparecencia) cumplo así mi deber como expresidente y ciudadano ante cualquier tema y convocatoria legal a las que siempre asistiré para que todo funcionario corrupto sea sancionado. Ajeno a sobornos y coimas, creo que la única riqueza para un político es el honor de servir al pueblo y representar a la nación”, afirmó García en un comunicado que leyó a los medios nada más salir de la Fiscalía.
La Fiscalía anticorrupción citó al exmandatario para recoger sus declaraciones sobre las presuntas irregularidades en la licitación de la construcción del Gasoducto Sur Peruano abiertas contra la ex primera dama Nadine Heredia, esposa del expresidente Ollanta Humala (2011-2016).
Respecto a ese tema, García insistió en que ese fue un proyecto aprobado fuera de su mandato y que fue modificado respecto al plan original para ser “sobredimensionado” y para favorecer a las empresas operadoras a un alto costo para el Estado.
“Deben investigarse las circunstancias por las que se cambiaron los términos del contrato, gravando las espaldas del pueblo peruano”, afirmó García en este respecto.
El expresidente aterrizó ayer por la mañana en Lima procedente de España en un movimiento que contrastó con los rumores reflejados en la prensa local que decían que no iba a personarse ante el fiscal y que su comparecencia había sido suspendida.
García ha estado fuera de Perú en los últimos meses, tras las declaraciones de Odebrecht de haber entregado sobornos por 29 millones de dólares en Perú entre 2005 y 2014, periodo que comprende los Gobiernos de Toledo, García y Humala.
ENVÍAN DOCUMENTO
La Cancillería del Perú envió a EEUU la versión digital de la documentación complementaria que había requerido el Departamento de Justicia para que el pedido de detención preventiva con fines de extradición formulado contra el expresidente Toledo.
Según una fuente del Ministerio de Relaciones Exteriores, tras ser validados por el Consulado de EEUU en Lima, la versión física de los documentos fue enviada anteanoche a EEUU.
“La versión digital ya está en EEUU. La pelota queda en su cancha”, expresó la fuente al diario Perú21.