California se blinda para guerra ecológica con Trump
Los Angeles, Miami Y Washington |
La liberal California se colocó la armadura para defender su legislación ecológica de vanguardia del presidente Donald Trump, que ordenó revisar la política de EEUU contra las emisiones de dióxido de carbono.
En tanto, las medidas de Trump han despertado las alarmas en Florida, amenazada por el cambio climático.
Trump firmó un decreto para desmantelar el “Plan Energía Limpia” (Clean Power Plan) -una medida clave de su antecesor Barack Obama para luchar contra el calentamiento global-- e impulsar el empleo en el sector energético, sobre todo del carbón, la fuente más contaminante.
El foco de la orden presidencial está en las regulaciones sobre emisiones de gas, principalmente las de automóviles, que se inspiró en una ley de California.
Las autoridades del gran estado del oeste de EEUU, el más poblado además y bastión demócrata, desafiaron la medida, reafirmando su intención de ampliar aún más sus regulaciones sobre contaminación.
El gobernador demócrata Jerry Brown envió una carta al director de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), Scott Pruitt, para protestar contra este “desmesurado regalo a los contaminadores”.
California lleva décadas esforzándose a limpiar el aire comprometido por las emisiones de su gigantesco parque automotor, sobre todo en Los Ángeles, donde ya no aparece aquella neblina acre de la década de 1970.
Miami
La decisión de Trump de fomentar las energías fósiles preocupa especialmente en Florida, un estado que vive con la amenaza de inundaciones por el aumento del nivel del mar debido al cambio climático. Para científicos y algunas autoridades locales, el presidente está revirtiendo así la esperanza de los floridanos de posponer unos años su vaticinado hundimiento.
Los expertos pronostican que tan pronto como en 2060 el nivel del mar habrá aumentado entre 35 y 66 centímetros, lo cual dejará bajo el agua toda la costa del sur de Florida, un estado pantanoso a ras del mar que no tiene colinas ni elevaciones adonde los pobladores puedan trasladarse.
El estado sureño está condenado “no sólo por su topografía sino por su geología: tiene rocas muy porosas, es permeable y el agua se filtra por el sustrato”, explicó Henry Briceño, geólogo de la Universidad Internacional de Florida.
RECHAZAN PRESUPUESTO PARA CONSTRUIR UN MURO
El líder de la minoría demócrata en el Senado de EEUU, Chuck Schumer, aseguró ayer que su bancada está “unida” contra cualquier legislación presupuestaria que incluya fondos para construir una barrera fronteriza con México y afirmó que “no van a tolerar” ninguna propuesta que incluya el muro.
Schumer insistió en la unidad del caucus contra la petición presupuestaria del presidente Trump para destinar fondos a la construcción del muro, así como para incrementar el número de agentes de inmigración dedicados a ejecutar deportaciones.
“El impulso contra el muro está creciendo. (...) Creo que nuestros amigos republicanos se van a dar cuenta de que poner un muro en el presupuesto es una derrota”, indicó el senador en relación al bloque que pueden ejercer los demócratas sobre la legislación presupuestaria que deben acordar para finales de abril.
En tanto, el otrora rival de Trump en las primarias republicanas, Jeb Bush, tiene un consejo sencillo para el nuevo inquilino de la Casa Blanca: “dejar de decir cosas que no son verdad.”
Bush da la bienvenida a algunas de sus iniciativas, especialmente en el cuestionamiento de numerosas regulaciones, pero se muestra muy crítico de su estilo.