El Papa llama a la Iglesia a ir a cada rincón de la vida
El papa Francisco llamó ayer a su Iglesia y a los nuevos cardenales a seguir el ejemplo de Jesús y acudir “a todos los rincones de la vida” para “tocar” el sufrimiento de la gente, durante la misa en honor a San Pedro y San Pablo.
El Pontífice, durante su homilía en la plaza de San Pedro, indicó que el “amor” de Cristo “supone ir a todos los rincones de la vida para alcanzar a todos”, aunque, como en su caso, “eso le costase el buen nombre, las comodidades, la posición o el martirio”.
En este sentido realizó un llamamiento a su Iglesia para que no caiga en “la tentación” de mantenerse aséptica y alejada del dolor de las personas.
“No son pocas las veces que sentimos la tentación de ser cristianos manteniendo una prudente distancia de las llagas del Señor. Jesús toca la miseria humana, invitándonos a estar con él y a tocar la carne sufridora de los demás”, recordó el Papa.
Señaló que “confesar la fe con nuestros labios y con nuestro corazón exige identificar los secretos del maligno”.
Pero también “aprender a discernir y descubrir esos cobertizos personales o comunitarios que nos mantienen a distancia del nudo de la tormenta humana”.
Recordó ante los prelados y cardenales que “Jesús el Ungido de poblado en poblado camina con el único deseo de salvar y levantar lo que se creía perdido, unge al muerto, al enfermo, las heridas, al penitente, la esperanza”.
“En esa unción, cada pecador, perdedor, enfermo, pagano, allí donde se encontraba, pudo sentirse miembro amado de la familia de Dios. Con sus gestos, Jesús les decía de modo personal: tú me perteneces”, catequizó.
En esta misión a los jerarcas católicos, el Pontífice argentino indicó que, en el ejemplo de Cristo, “la gloria y la cruz”, su muerte, “van de la mano y no pueden separarse”.
Explicó que “al no separar la gloria de la cruz”, su fin, Jesús con su ejemplo rescata a su Iglesia de “triunfalismos vacíos” de “amor, de servicio, de compasión y de pueblo”.
CATORCE NUEVOS CARDENALES
En esta misa participaron los 14 nuevos cardenales creados el jueves.
También el claretiano español Aquilino Bocos Merino; el prelado emérito de la diócesis boliviana de Corocoro, Toribio Ticona Porco, y el arzobispo emérito de la mexicana Xalapa, Sergio Obeso Rivera, estos tres sin posibilidad de participar en un eventual cónclave por superar los 80 años de edad.