Perú aguarda la llegada de más de 20.000 venezolanos a su frontera
Las autoridades peruanas aguardan la llegada de más de 20.000 venezolanos a su frontera a menos de 48 horas de que se endurezcan las normas de tránsito fronterizo para los inmigrantes de ese país, confirmó ayer a Efe una fuente oficial.
A partir de las 00:00 de este sábado Perú impedirá el ingreso de los venezolanos que no cuenten con pasaporte, misma medida a la tomada por Ecuador desde el pasado sábado.
“Ecuador ha dispuesto nuevas medidas como brindar buses a los ciudadanos venezolanos que se dirigen a Perú, con lo cual la cifra antes estimada, de 17.000 inmigrantes, se elevaría”, señaló la misma fuente.
La Prefectura de la provincia ecuatoriana de Pichincha, cuya capital es Quito, ha creado un “corredor ciudadano” y fletado seis autobuses para trasladar a emigrantes venezolanos desde su frontera con Colombia hasta su límite con Perú antes del sábado.
Esta exigencia de permitir el ingreso únicamente a los venezolanos que tengan pasaporte fue anunciada el pasado viernes por el primer ministro de Perú, César Villanueva, por razones de seguridad, ya que alegó que la cédula de identidad venezolana es fácilmente falsificable y carece de datos básicos.
Además, el Gobierno peruano ha reducido, del 31 de diciembre al 31 de octubre, el plazo que tienen los venezolanos para solicitar el Permiso Temporal de Permanencia (PTP), una categoría migratoria que les permite residir y trabajar en el país legalmente.
Estas medidas llegaron pocos días después de que la Policía Nacional del Perú (PNP) informara que una quincena de miembros de la organización criminal “El Tren de Aragua” había entrado a Perú con cédulas falsas, entre ellos uno que, tras ser detenido, confesó haber cometido seis asesinatos en su país.
La ONG Unión Venezolana en Perú entregó el lunes una carta a la Cancillería de Perú para que evalúe el ingreso al país sin pasaporte de niños, mujeres gestantes, adolescentes, enfermos crónicos y ancianos venezolanos.
En la misiva dirigida al ministro de Relaciones Exteriores de Perú, Néstor Popolizio, solicitaron que “por razones estrictamente humanitarias” se permita el ingreso de este grupo humano vulnerable que “por diversos motivos” no cuentan con un pasaporte. A las nuevas medidas migratorias se suma la implementación en Tumbes, ciudad fronteriza con Ecuador, y por donde ingresan el mayor número de inmigrantes venezolanos, del recién inaugurado Registro Fotográfico y Decadactilar de las personas extranjeras.
2,3 millones de venezolanos viven fuera de su país, mientras que 1,6 millones han abandonado Venezuela desde 2015.
LA ONU PIDE MEJOR ACOGIDA
La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) pidieron ayer a los países vecinos y de la región que acojan a los venezolanos que se han visto obligados a abandonar su país.
Estos organismos dijeron que se calcula que 2,3 millones de venezolanos están viviendo fuera de su país y que más de 1,6 millones han salido desde 2015, y el 90 por ciento se encuentra en países de Suramérica.
ANÁLISIS
Héctor Pereira. Corresponsal de Efe en Caracas
Nueve dólares extras que mantienen a los venezolanos en la miseria
El violento aumento salarial que multiplicará por 35 los ingresos de los venezolanos se traduce en 9 dólares más a los percibidos hasta ahora y son igualmente insuficientes para enfrentar la megadevaluación de la moneda así como el alza de precios e impuestos decretados por el Ejecutivo.
Cuando el jefe de Estado, Nicolás Maduro, anunció el pasado viernes que desde el 1 de septiembre el sueldo aumentará a 1.800 bolívares soberanos ese monto equivalía a 723 dólares al menos según la tasa oficial Dicom, a la que prácticamente ningún ciudadano tiene acceso.
Pero, esta semana la moneda nacional se devaluó 95,8 por ciento en el mercado oficial, por lo que un dólar pasó de costar 2,49 bolívares soberanos a 60, un aumento del 2.311 por ciento.
Con el salario anterior, en teoría, un venezolano devengaba mensualmente 52 bolívares soberanos o 21 dólares estadounidenses y ahora percibirá 30 dólares, lo que sigue dejando a los trabajadores del país petrolero sumidos en la miseria.