DDHH de la ONU insta a Venezuela a aceptar ayuda humanitaria
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó ayer una resolución histórica sobre Venezuela en la que pide al Gobierno del presidente Nicolás Maduro “aceptar la ayuda humanitaria” para solucionar los problemas de “escasez” de alimentos y medicamentos.
Es la primera vez de su historia que el Consejo adoptó una resolución sobre Venezuela, precisó un portavoz del órgano de la ONU con sede en Ginebra, Rolando Gomez.
El texto, propuesto por varios países latinoamericanos, entre ellos Argentina, Perú, Chile, Colombia, y también Canadá, fue adoptado por 23 votos de los 47 Estados representados en el Consejo. Diecisiete países se abstuvieron y siete votaron en contra, entre ellos China, Cuba y Venezuela.
La resolución pide a Caracas que “acepte ayuda humanitaria con el fin de remediar la escasez de alimentos, medicamentos y suministros médicos” que han provocado un “aumento de la malnutrición, en particular en los niños, y en la aparición de enfermedades que habían sido erradicadas o controladas anteriormente en Sudamérica”.
El Consejo se declaró “profundamente preocupado por las graves violaciones de los derechos humanos, que se producen en el contexto de una crisis política, económica, social y humanitaria”, tal como reveló un informe del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU publicado en junio de 2018.
El órgano de la ONU en Ginebra exhorta al Gobierno venezolano “a cooperar” con el Alto Comisionado, dirigido desde septiembre por la expresidenta de Chile Michelle Bachelet, a quien le pide que presente un “informe completo” sobre la situación en Venezuela en la 41 sesión del Consejo, que tendrá lugar en junio de 2019.
El embajador venezolano ante la ONU en Ginebra, Jorge Valero, condenó la resolución y la consideró “el comienzo de una escalada intervencionista” para conseguir la caída del Gobierno y “establecer un mecanismo de tutela” foráneo sobre Venezuela.
Acusó a los países que promovieron la resolución de ser instrumentos de Estados Unidos e Israel en contra de su país.
El 11 de septiembre, el ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, asistió a la apertura de la sesión actual del Consejo de Derechos Humanos de la ONU y saludó la llegada de Bachelet a la cabeza del Alto Comisionado. Aseguró que ella podía dar por contado la “completa cooperación” de su país.
Venezuela atraviesa una aguda crisis económica desde que se intensificó la caída de los precios del crudo entre 2014 y 2016. Según la ONU, unos 2,3 millones de venezolanos (7,5 por ciento de la población de 30,6 millones) viven en el exterior, de los cuales 1,6 millones han emigrado desde 2015, con el recrudecimiento de la crisis.
Las anteriores tentativas de introducir el caso de Venezuela en la agenda del Consejo habían fracasado, pero esta vez el llamado “Grupo de Lima” (compuesto por países americanos que buscan un cambio de rumbo del Gobierno venezolano) consiguió este objetivo.
Caracas ha negado reiteradamente la entrada de expertos de derechos humanos de la ONU a su territorio, por lo que los autores de los dos informes de la Oficina del Alto Comisionado han sido elaborados a partir de información recolectada en países vecinos.
Seis países de América solicitaron a Naciones Unidas que interceda “urgentemente” en la crisis venezolana.
CONSEJO DE SEGURIDAD
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, abogó ayer porque el Consejo de Seguridad trate la crisis de Venezuela, tal como propugna EEUU y rechaza la mayoría de países latinoamericanos, mientras hizo una encendida defensa ante la ONU a que los países den prioridad a luchar contra el cambio climático.
Piñera intervino ayer en la 73 Asamblea General de la ONU y, en la parte final de su discurso, abordó la crisis venezolana y apostó por “ayudar a los venezolanos con todos los instrumentos del derecho internacional a recuperar sus libertades, democracia y respeto a los derechos humanos”.
POMPEO PIDE APLICAR SANCIONES A NORCOREA
EFE
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, advirtió ayer que las sanciones contra Corea del Norte deben ser aplicadas “vigorosamente”, al hablar en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU a la cual también asistieron sus homólogos de Rusia y China.
Sin embargo, Moscú y Pekín llamaron a flexibilizar las medidas.
El ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, dijo a su turno que las sanciones no deben convertirse en un “castigo colectivo”, y lamentó que las grandes potencias no puedan, debido a la hostilidad estadounidense, acompañar con “signos positivos” el cambio significativo de Corea del Norte, que un año atrás constituía una amenaza de guerra atómica.
El canciller chino, Wang Yi, defendió la posibilidad de adoptar medidas de “cooperación” para el “bienestar” de los norcoreanos.
TRUMP, SOBRE SU DISCURSO EN LA ONU: “NO SE REÍAN DE MÍ, SE REÍAN CONMIGO”
También como las estrellas de la música, el martes, ante la Asamblea de la ONU, el presidente de EEUU, Donald Trump, apareció tarde pero con estruendo. Nada más empezar a hablar, cuando se jactó de que su administración “había logrado más cosas en solo dos años” que cualquier otra administración estadounidense en la historia, los representantes de países allí presentes se carcajearon.
Este miércoles, en la conferencia de prensa, le preguntaron por ello y respondió: “No se reían de mí, se reían conmigo. Nos lo pasamos bien”, aseguró el mandatario.
“Los medios de comunicación mentirosos dijeron que la gente se rió. La gente se lo estaba pasando bien. Estábamos en ello juntos”, agregó.
Los ya tradicionales ataques a la prensa aparecieron en la comparecencia, pero en versión divertimento para Trump. Cuando dio la palabra a un periodista del “fracasado” New York Times, el reportero replicó que el periódico no estaba fracasando en absoluto estos días. Y Trump se apuntó el mérito: “Les va bien. Deberías decir: ‘Gracias, presidente”, señaló, convencido de su tirón mediático. “¿Se imaginan que no me tuvieran?”, dijo en otro momento. A un periodista kurdo lo llamó “señor Kurdo”. Y llegado un punto, confesó: “Podría hacer esto durante todo el día”.
En la rueda de prensa también atacó a China, a Irán y al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.