Los “chalecos amarillos” arremeten contra Macron y éste ve “violencia extrema”
París, Francia
Al menos 50 mil “chalecos amarillos” volvieron a desafiar ayer, por octava vez consecutiva, al Gobierno francés con protestas que terminaron en episodios de violencia callejera, denunciados como un “ataque a la República” por el presidente Emmanuel Macron.
“Una vez más, una violencia extrema vino a atacar la República, a sus guardianes, a sus representantes, a sus símbolos. Quienes cometen estos actos olvidan el corazón de nuestro pacto cívico. Se hará justicia. Todos deben serenarse para que pueda producirse el debate y el diálogo”, escribió el Presidente en Twitter.
El denominado “VIII Acto” de la movilización reunió 50 mil personas, muchos más que los 32 mil manifestantes de la semana pasada, anunció el ministro del Interior, Christophe Castaner. El fin de semana antes de Navidad, los “chalecos amarillos” convocaron 65 mil seguidores.
El Ministro del Interior minimizó la convocatoria tildándola de poco representativa, pero la primera movilización de 2019 fue más contundente contra el alza del precio de los combustibles, para luego defender reivindicaciones más amplias, relativas a los impuestos o al derecho a un referendo de iniciativa ciudadana.
RESULTADOS
En cifras
El portavoz Benjamin Griveaux fue evacuado tras el destrozo de la puerta del ministerio.
Hubo un gendarme herido, un restaurante-barcaza incendiado y motos, monopatines y un auto destrozados.
Hubo pedradas y botellazos de manifestantes, y gasificación lacrimógena de la Policía.