Kim va a Vietnam para una nueva cumbre con Donald Trump
El líder norcoreano Kim Jong-un tiene previsto llegar hoy a Hanói tras un largo viaje en tren a través de China para reunirse por segunda vez con el presidente estadounidense Donald Trump tras su primer encuentro, el año pasado en Singapur.
Kim Jong-un subió el sábado en Pyongyang a su tren blindado de color verde para su viaje a través de China.
Aunque su trayecto es secreto, el convoy norcoreano podría, según fuentes en Vietnam, llegar hoy a la estación de Dong Dang, una localidad vietnamita en la frontera con China, tras haber recorrido unos 4.000 kilómetros.
En junio Kim se comprometió a “trabajar por la desnuclearización completa de la península coreana”. Pero desde entonces la falta de avances provoca el escepticismo de los observadores.
Stephen Biegun, el emisario de Estados Unidos para Corea del Norte, reconoció recientemente que Pyongyang y Washington “no se pusieron de acuerdo sobre lo que significa” la desnuclearización.
Estados Unidos reclamó varias veces que Pyongyang se deshaga de su arsenal nuclear de manera completa, verificable e irreversible.
Para Corea del Norte, la desnuclearización tiene un sentido más amplio y reclama a su vez el final de las sanciones económicas internacionales y lo que considera las amenazas estadounidenses, como su presencia militar en Corea del Sur y en la región en general.
Trump pareció rebajar las expectativas de la cumbre en Hanói cuando dijo el domingo que no tenía prisa por la desnuclearización mientras Corea del Norte no lleve a cabo ensayos nucleares y lanzamiento de misiles, como ha dejado de hacer hace un año.
Hanoí se ha blindado con fuertes medidas de seguridad y ha organizado variopintas celebraciones ante la llegada de Kim y Trump.
Los controles de seguridad se notan desde hace días, en especial en las calles más céntricas, con militares y policías patrullando de forma constante y con un contingente de miles de agentes esperando a ser desplegado durante la cumbre.
“La seguridad estará al máximo nivel”, afirmó ayer el viceministro de Asuntos Exteriores vietnamita, Le Hoai Trung.