Campaña electoral en España entra a recta final
La campaña para las elecciones generales españolas llegó ayer al inicio de su recta final en un ambiente bronco y con una gran incertidumbre pues las encuestas no otorgan mayoría suficiente para gobernar en solitario a ningún partido, aunque los socialistas están en cabeza.
Por primera vez desde la restauración de la democracia en España en 1977, cinco partidos nacionales tienen opciones de repartirse la mayoría parlamentaria el próximo 28 de abril: PSOE (socialistas), PP (conservador), Ciudadanos (liberales), Unidas Podemos (izquierda) y Vox (ultraderecha), nuevo en unas elecciones generales, lo que ofrece un tablero muy plural.
En una campaña dura y ante la perspectiva de resultados inciertos, el jefe del Gobierno español y candidato a la reelección por el PSOE, Pedro Sánchez, y el presidente del PP, Pablo Casado, como líderes de los dos principales partidos españoles, han pedido sin tapujos el voto útil a izquierda y derecha para garantizarse un Gobierno estable.
Ayer mismo, Pedro Sánchez reclamaba “a los que están pensando en otras opciones políticas (…) aunar el voto en la única fuerza que puede frenar a las tres derechas (en referencia a PP, Ciudadanos y Vox), que es el PSOE”.
También el candidato del PP solicitaba ayer para el 28 de abril un voto “unido, moderado, sensato y centrista”, con el que conseguir el mayor número de escaños posibles para desalojar del Ejecutivo a Pedro Sánchez.
Las encuestas auguran una gran caída del PP, que en la última legislatura fue el partido mayoritario con 137 diputados de los 350 del Congreso.
En los últimos días, el tema central ha sido el de los debates entre candidatos y ayer finalmente ha quedado fijado que habrá dos la próxima semana en dos días consecutivos —uno en la televisión pública y otro en una cadena privada—, en los que participarán los cabezas de lista de los cuatro partidos con representación parlamentaria: PSOE, PP, Ciudadanos y Unidos Podemos.