Evo, muy “preocupado” por la economía
El presidente Evo Morales confirmó ayer la desaceleración económica de Bolivia (4,3 por ciento en mayo); expresó la “enorme preocupación” por el crecimiento del desempleo y reconoció una reducción de las exportaciones (sobre todo de hidrocarburos).
Advirtió que “no es culpa del Evo” que hayan bajado los precios internacionales de petróleo, y anunció para este año una inversión pública récord de 8.100 millones de dólares. Morales hizo todos estos anuncios durante su mensaje, en una sesión de honor realizada por primera vez en Tarija, por los 191 años de la Independencia de Bolivia. Opositores y analistas económicos destacaron que finalmente el Presidente reconozca la situación económica del país y le reclamaron soluciones.
En su discurso presidencial de menos de una hora (hubo ocasiones en que le tomó hasta seis horas), Morales reveló que el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) se situó en mayo de este año en 4,3 por ciento, cuando al primer trimestre de la gestión se había llegado a 4,9 por ciento.
Morales dijo que estos cálculos, que “no podemos ocultar”, corresponden al Índice Global de Actividad Económica (IGAE).
Si se mantiene esa cifra de crecimiento hasta octubre, no habría doble aguinaldo, puesto que el Decreto Supremo 1802 dispone que hasta esa fecha debe existir un alza de 4,5 por ciento para que haya ese beneficio.
El Gobierno tenía previsto, a principios de gestión, cerrar 2016 con un crecimiento de 5 por ciento. Además, su Plan de Desarrollo Económico y Social preveía un crecimiento promedio de la economía boliviana de 5,8 por ciento entre 2016 y 2020.
Sin embargo, otros organismos internacionales calcularon porcentajes menores para este año: la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), 4,5 por ciento; el Banco Mundial, 3,7 por ciento, y el Fondo Monetario Internacional (FMI), 3,8 por ciento.
El descenso de las cifras de crecimiento se debe principalmente a la caída de los precios internacionales de petróleo y a la baja en la demanda de materias primas, según admitió el propio Mandatario. “Eso no es culpa del Evo”, adelantó, sino de los países industrializados que “deciden los precios de las materias primas”.
Además, debido a la baja del precio del gas natural, el sector de hidrocarburos cayó a mayo en -3,8 por ciento, frente al -0,9 acumulado al mismo mes de 2015.
Morales también reconoció que la producción de gas natural descendió de 60 a 58 millones de metros cúbicos diarios, si bien manifestó su optimismo porque en los siguientes días se anunciarán nuevos campos en producción para reponer la merma del hidrocarburo.
En cuanto a minería, Morales sostuvo que este sector se está recuperando “felizmente”.
Empleo
El Gobernante advirtió también que debe ser de “enorme preocupación” el que la tasa de desempleo urbano abierto en Bolivia haya crecido de 3,5 a 4,4 por ciento entre 2014 y 2016, aunque recordó que en 2006, cuando él llegó al poder, la tasa era de 8,1 por ciento. “Ministras, ministros, esto debe ser una enorme preocupación, saber cómo, dónde y por qué va subiendo el desempleo”, recomendó Morales.
También reconoció la reducción de las Reservas Internacionales Netas (RIN) del país, de los 15 mil millones de dólares reportados a 2014 a los actuales 11 mil millones.
Morales informó que la inversión pública llegó a 3.127 millones de dólares entre enero y junio de este año, tomando en cuenta que la inversión estatal fue de 2.383 millones y de las empresas públicas 744 millones. En ese marco, anunció para este año una inversión estatal récord de 8.100 millones de dólares.
Tema Patzi
En su discurso, Morales dijo también que actualmente, las gobernaciones, alcaldías y universidades tienen en caja y bancos 11 mil millones de bolivianos, a diferencia de 2013, cuando esa cuenta representaba un monto de 17.259 millones de bolivianos.
“Saludo, ahora me sorprendió ese dato. Están gastando pero aún tienen 11 mil millones de bolivianos”, indicó. “No obstante, hay gobernaciones como de La Paz, que demanda mayores recursos, bajo el argumento de que existe carencia de ingresos para ejecutar obras”, añadió en clara referencia al gobernador de oposición, Félix Patzi, quien cumplió una huelga de hambre de 12 días con esta demanda.
Vicepresidente
El vicepresidente, Álvaro García Linera, en tanto, dijo en su discurso que el Gobierno apostó a la industrialización y que se avanza en ese objetivo.
“Como sociedad, nos hemos planteado el objetivo de industrializar los recursos naturales. Ya lo estamos haciendo con el gas y el litio, garantizando el ingreso económico de las próximas tres décadas. La consigna es convertirnos en el centro energético y el litio será el combustible que moverá el mundo”, manifestó.
García Linera indicó que Bolivia logró la mayor inclusión política más elevada del mundo, que permitió reducir la diferencia económica en ocho puntos con relación a Chile y estimó que en 10 a 13 años alcanzará a la economía chilena.
También planteó mantener una fecunda articulación entre el Estado y la sociedad, donde los movimientos populares mantengan el poder político, al haber sido autores del mayor crecimiento económico de Latinoamérica.