Gobierno y cooperativistas
El Ministro de Gobierno, —no el de Minería y Metalurgia ni el de Economía y Finanzas, como hubiera sido de esperar— ha “revelado” en una conferencia de prensa, que existen contratos suscritos entre cooperativas mineras y empresas extranjeras para la explotación de minerales. Más aún, reveló detalles como, por ejemplo, que los nombres de las empresas extranjeras “están en inglés en las escrituras”.
Por la forma, el tono, las circunstancias en que se produjo, y sobre todo el origen de la “revelación”, se diría que tal información fue el resultado de un arduo trabajo de los servicios de inteligencia del Estado en su incansable afán de descubrir y desbaratar complots antigubernamentales, generalmente prohijados “por el imperialismo” y sus “agentes internos”.
Sin embargo, como es por demás evidente, ninguno de los abusos de los mineros cooperativistas era desconocido para el Gobierno del MAS. Lejos de ello, fueron desde un inicio sus principales aliados —compartiendo ese privilegio con los cocaleros del Chapare— y fue para afianzar esa alianza política que el actual Gobierno multiplicó los privilegios de los que goza ese sector hasta niveles cuya peligrosidad fue oportunamente advertida por quienes se preocupan por la buena marcha de los asuntos del país.
No es pues admisible que a estas alturas de la historia, y cuando las primeras manifestaciones de la crisis económica empiezan a hacerse sentir, que las autoridades gubernamentales finjan sorpresa y se atribuyan un sentido de responsabilidad del que no dieron ninguna muestra durante los últimos 10 años.