Agua potable en cisternas de YPFB
El pasado lunes 21 con gran despliegue publicitario la estatal del petroleo distribuyó agua a la población paceña. Una caravana de 10 cisternas recorrió varias arterias de la ciudad hasta llegar a su destino en la Zona Sur. Inclusive uno de los camiones era conducido por el presidente de YPFB, quien anunció que 27 cisternas distribuirían agua potable, muchas de las cuales son nuevas. (LT 22.11.2016) En consecuencia, otras no lo son, ergo, han sido usadas en el transporte rutinario de combustible y habrían sido habilitadas utilizando un protocolo para eliminar todos los residuos de combustibles.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) de las Naciones Unidas prohíbe terminantemente el uso de cisternas que hayan transportado hidrocarburos para transportar agua potable, aun en una situación de emergencia. Por lo tanto, no existe un protocolo para habilitar cisternas que hayan trasportado combustibles. La OMS indica que sólo se puede transportar agua potable, en cisternas usados, cuando estos solamente hayan transportado productos alimenticios y después de seguir un riguroso protocolo de limpieza. El protocolo de la OMS establece cuatro pasos para habilitar dichas cisternas.
(1) Selección de Tanque: El tanque seleccionado sólo puede haber sido usado para alimentos líquidos como por ejemplo leche, aceite de cocina, jugos de frutas, vinos o vinagres. Los tanques que previamente hubieran sido usados para contener líquidos no alimenticios tales como combustibles o aguas residuales, no deben ser usados para agua potable. Los tanques deben ser de limpieza fácil: ser accesibles, sin abolladuras u otros defectos que puedan obstaculizar la remoción de residuos de comida. (2) Limpieza: Se debe usar una mezcla de detergente y agua caliente en chorro de alta presión y cepillo rígido. (3) Desinfección: Usar hipoclorito de calcio que una vez mezclado con agua libera entre el 60 por ciento y el 80 por ciento del cloro contenido. El líquido clorado usado como desinfectante debe ser totalmente eliminado con agua potable mantenido en reposo por cuatro horas. (4) Disposición segura de los líquidos usados para la limpieza del tanque.
La OMS publicó esta prohibición, entre otras razones, al evidenciar múltiples afecciones adversas que perturban la salud pública. No sólo por contacto cutáneo o por vías respiratorias, sino especialmente por la ingesta de agua contaminada por petróleo, por productos refinados y petroquímicos. Existen varios estudios, uno de ellos Hurtig y San Sebastián (2004), que en Ecuador correlacionan leucemia en niños y ancianos por ingestión o contacto con agua contaminada por hidrocarburos. Otros estudios ( Gay, J., Shepherd, O., Thyden, M., Whitman, M. 2011) encuentran indicios de cáncer en personas en contacto con agua contaminada por hidrocarburos. De acuerdo a normas de la Comunidad Europea el límite permisible de hidrocarburos en el agua es de 0,01 ppm.
YPFB tiene la Dirección Nacional de Medio Ambiente (DNMA) que desarrolla actividades que van desde el procesamiento de licencias ambientales, relacionamientos comunitarios, capacitación en temas de salud, seguridad y medio ambiente, fiscalización y varias otras. Es de competencia de DNMA de YPFB la elaboración y aprobación de los protocolos que establecen los procedimientos concretos en la materia para las actividades que se desarrollan en cada repartición operativa. Con seguridad los profesionales de la DNMA conocen el protocolo de la OMS y saben de su prohibición de utilizar cisternas de combustibles para el transporte de agua potable.
Si esto es así, entonces surgen naturalmente algunas preguntas. ¿Se pidió autorización a la DNMA para utilizar cisternas? ¿Qué instancia elaboró y aprobó el protocolo que según el Presidente de YPFB se siguió para habilitar el uso de cisternas contaminados? Antes de ser entregada el agua al público, ¿se hicieron los análisis de pureza del agua transportada? ¿Cómo saber si es cierto que YPFB tenía, para esta emergencia, cisternas nuevos guardados sin utilizar?
La respuesta es de perogrullo, no. No se consideraron estos aspectos fundamentales que hacen a la salud pública, porque el Gobierno privilegia el espectáculo, la simbología, por eso no es casual que la máxima autoridad de YPFB se ponga al volante de un cisterna para distribuir agua a la gente necesitada, reproduciendo la burda imagen del otro Presidente de YPFB de apellido Aruquipa quien ante la carencia de GLP, distribuía personalmente las garrafas de gas, aunque, hay que recalcar la gravedad actual, porque se está atentando contra la salud pública.
Todo indica que la instrucción para usar las cisternas de YPFB vino de las más altas esferas de Gobierno que actúan despreciando los avances de la ciencia en la preservación de la salud.
Los autores son Experto en Hidrocarburos e Investigadora Senior, respectivamente.
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