Lo grande y positivo
En el anterior artículo hice referencia a una publicación escrita por Mark Oliver, en la que señala varios factores para el futuro inmediato de la política mundial. Comienza Oliver indicando que Estados Unidos está entrando en una crisis económica significativa en lo financiero, de la que no puede escapar. Si bloquea las importaciones de China, como pretende y como debería haber hecho hace mucho tiempo, descubrirá que está amarrado por su deuda externa. El problema es para ambas partes, porque si China golpea económicamente a Estados Unidos, su quiebra financiera desarreglará buena parte de las finanzas mundiales y China no tendrá cómo recuperar lo que Estados Unidos le debe. En todo caso, la economía estadounidense entrará en depresión, lo que permitirá que el yuan reemplace al dólar.
Con Estados Unidos en gran depresión, cesará su política de gendarme mundial, particularmente en lo financiero. Agregándose a esto, Oliver pronostica que las economías europeas se contraerán.
Oliver considera que muchas actitudes políticas vigentes actualmente en China se propagarán a otros países. No creo tal cosa; simplemente muchas cantinelas políticas estadounidenses dejarán de estar de moda.
Oliver considera que se producirá dos cosas más: que China arrinconará económicamente a Japón y que también China invadirá Taiwán; y finalmente que habrá guerra entre China y Estados Unidos. De estas cosas daré mi opinión.
Por su volumen, India tiene la tercera economía mundial. Unos años más y será mayor que la de Estados Unidos, dada su gran población. En cuanto a China, podemos considerar que en 20 años su economía será tres veces mayor que la de Estados Unidos. Pero ocurre que China tiene una pléyade de socios económicos y la animadversión de casi todos los países que le son limítrofes, como ser Japón, Filipinas, Vietnam e India. Actualmente Japón está aliado a Estados Unidos, pero tácitamente también a la India. En cuanto a Rusia, es una nación demasiado interesada en su comercio con China, pero no por eso deja de vender armas a India. De modo que la guerra en ciernes está por esos mares de China, aunque no puede estallar por el gran interés que hay en el comercio con China. Aun así, no puede descartarse y en esto una invasión china a Taiwán sería un episodio. De ocurrir, será cuando la economía china sea el triple de la de Estados Unidos.
Tras estas cosas viene lo grande y positivo, señalado por Oliver: En las próximas décadas China invertirá un trillón de dólares ($us.1.000.000.000.000) en África, para aprovisionarse de materias primas en grande. Esto producirá desarrollo económico en África y consecuentemente se controlará el crecimiento de la población en ese continente.
¿Qué pasará con Rusia? Si vendiendo gas a Europa y sobre todo a China la economía rusa termina creciendo marcadamente, bien que se podrá duplicar, pero aun así no estará en primera fila. Empero sí que podrá estar en primera línea en lo militar, como ya ocurre actualmente. La estrategia temida es que Estados Unidos, secundado por sus socios de la OTAN, lleve a Rusia a una situación insoportable para así provocar una guerra en Europa. Rusia contaría con el soporte económico de China, porque este país no puede permitir que su inmenso vecino pueda, en el peor de los casos, quedar bajo la hegemonía de sus contrincantes. La guerra con Rusia es posible, particularmente antes de que Estados Unidos se hunda en crisis económica. Mientras eso no ocurra, está en ciernes, sin ser inevitable.
El autor es escritor
Columnas de BERNARDO ELLEFSEN