El primer revés de Bolsonaro a Bolivia

No habían transcurrido ni 24 horas para que el presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, dé el primer revés a Bolivia en alianza con el presidente de Chile, Sebastián Piñera.

Se trata nada más y nada menos que del proyecto comercial más preciado del país: el ferrocarril bioceánico.

“Conversamos del corredor bioceánico que va a unir puertos del Atlántico a través de Paraguay Argentina y Chile, por puertos chilenos de nuestro norte”, fueron las palabras de Piñera que seguro retumbaron en los oídos de más de una autoridad boliviana que, en alianza con Perú impulsa un trazo diferente de esa vía férrea que pretende unir la costa del Atlántico con la del Pacífico excluyendo a Chile, a sus territorio y a sus puertos.

Las connotaciones políticas de las declaraciones del mandatario chileno son, sin duda, muy claras, pues, si la idea de ese proyecto prospera, Bolivia estaría casi atada de pies y manos si Brasil no apoya nuestra iniciativa, tomando en cuenta que se pretende que salir al océano Atlántico por el puerto de Santos.

La sintonía entre Piñera y Bolsonaro en torno a un corredor bioceánico para unir el océano Pacífico con el Atlántico,excluyendo a Bolivia y Perú, pone en riego los avances en materia de alianzas con países vecinos, diseños de factibilidad y negociaciones con consorcios europeos, en los que ya se había tomado la delantera con la esperanza puesta en que Brasil se sume.

Ahora, el andamiaje que Bolivia forjó para impulsar este proyecto comercial pende de un hilo hasta tener una respuesta positiva y de aliento de Bolsonaro, que en 2019 asumirá como primer mandatario de Brasil.

Editora de Economía de Los Tiempos