Deudas y licencias en el fútbol
El fútbol profesional en Bolivia se complica de nuevo debido a que, en teoría, los clubes tienen plazo hasta mañana para cumplir aspectos pendientes, entre ellos, las deudas a jugadores y exjugadores que iniciaron demandas en los tribunales de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) por montos relacionados a sus contratos, premios o traslados no pagados.
A un día de vencer el plazo establecido en una reunión entre dirigentes de Futbolistas Agremiados de Bolivia (Fabol) y de la FBF, surgen variantes que cambian el panorama, dando a entender que el plazo vehementemente anunciado sólo quedará en un acuerdo entre partes con escasas probabilidades de cumplimiento.
Una vez que el Comité Ejecutivo revise los casos, los pasará al Tribunal Superior de Disciplina Deportiva (TSDD), pero esta instancia debe coordinar entre todos sus miembros para reunirse y negociar; por lo que no se puede asegurar cuándo ni en cuánto tiempo se podría concretar un acercamiento.
A todo ello se suma que el TSDD señaló en días pasados que las sanciones se ejecutarían luego de volver a comprobar si es que se hicieron los pagos o no; lo que quiere decir que el plazo para los clubes deudores sería mayor.
Un aspecto que llama la atención es la manera en que el pasado lunes, con júbilo, se anunció que los 14 equipos bolivianos que ostentaban rango de asociados lograron sus respectivas licencias como clubes en pleno ejercicio; pero entre los requisitos fundamentales para lograr la acreditación se halla de manera resaltada el no contar con pagos o deudas pendientes a la asociación, federación ni a los jugadores. Entonces, lo que no se entiende es cómo los 14 clubes recibieron el aval.
Todo apunta a que los jugadores deben confiar en la buena fe de los clubes y sus dirigentes para que cubran con sus deudas pendientes.
Periodista de Deportes de Los Tiempos
Columnas de Geraldine Corrales Arandia