¿Es la única manera de verla?
Este domingo es la ceremonia de entrega de los premios Óscar. Una de las nominaciones que ha causado más polémica en países, como en su natal México, es la de Yalitza Aparicio a Mejor Actriz por su trabajo en la película “Roma” (Alfonso Cuarón) en el papel de una empleada doméstica.
Esta semana salía la noticia de que otras actrices mexicanas arremetían contra ella porque se trataba de una “don nadie”. Además, los titulares de revistas internacionales que han tenido acceso a hacer fotos y entrevistas con Aparicio, se ocupan de hablar del vestido de diseñador que puede vestir en la gala del domingo o del vestido con el que posa para la revista tal, o cual…
Incluso hay titulares que dicen que Aparicio es “oro de Hollywood”, claro, también se habla de su humilde origen y rasgos indígenas, así, como para poner algo de drama entre tanto glamour, con estructura de Cenicienta.
El asunto es que Yalitza ya se ha convertido en una especie de Pocahontas para la corte hollywoodense, moldeada a su mejor estilo. Que la Academia la nomine como Mejor Actriz, no significa que haya un cambio en la Academia, significa que esta institución sabe muy bien cómo manejar su publicidad, más allá del talento de Yalitza, parece que la única manera de ver a una mujer mexicana con rasgos indígenas es con vestidos de diseñador, en portadas de revista.
Al parecer todos estamos moldeados y adorando a la industria que refuerza clichés y, que encima, hay unas actrices mexicanas llenas de envidia porque no les ha tocado a ellas ser mejor “moldeadas”.
Editora de OH! y Lecturas de Los Tiempos
Columnas de CLAUDIA EID ASBÚN