Guerrero: A algunos les molesta que el Ministerio Público tenga una identidad propia

A ocho meses de concluir su gestión como fiscal feneral del Estado, Ramiro Guerrero habló con Los Tiempos sobre sus logros, pero también detalló las dificultades que atravesó durante su trabajo a lo largo de estos cinco años y cuatro meses. Señaló que en este tiempo pudo dar una “identidad propia” a la Fiscalía, autonomía en su labor enmarcada en la nueva Ley del Ministerio Público, aunque eso “moleste” a otras instancias del Estado.

Pese a tener más de una costilla fisurada, Guerrero concedió una entrevista a Los Tiempos durante su visita a Cochabamba, y aunque no tiene todavía claro qué hará después de dejar la Fiscalía General, dijo que necesita trabajar y buscará desarrollar alguna actividad relacionada con el ámbito de la justicia.

En estos últimos meses que le quedan como Fiscal General, ¿en qué área específica fortalecerá el trabajo?
En el Ministerio Público desde un principio hemos diseñado un plan estratégico, tenemos un plan operativo con objetivos claros, o sea que el trabajo continúa, el trabajo va a seguir como se ha hecho en los cinco años anteriores. Para el mes de febrero, por ejemplo, aquí en Cochabamba tenemos previsto la entrega de nuestro edificio remodelado en la calle Valdivieso, donde son las oficinas de la Fiscalía Departamental de Cochabamba.
Es un edificio remodelado aunque prácticamente lo hemos reconstruido. Tiene una capacidad para aproximadamente 150 personas, tiene una plataforma de atención al público, tiene oficinas modernas.
Luego, vamos a potenciar y reforzar el Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), que hasta medio año vamos a adquirir tres unidades móviles que los están construyendo especialmente para el IDIF, son similares al que se tiene en Tarija, que se adquirió el año pasado con el apoyo de la Gobernación de Tarija.
Luego seguimos con la Escuela de Fiscales, con la capacitación permanente en la formación inicial que tiene programas, planes que ya están empezando este mes con toda la currícula académica que tiene la Escuela.

¿Cómo evalúa el Modelo de Gestión Fiscal implementado que incluye a las fiscalías corporativas?
Sin duda, hemos mejorado bastante, sobre todo con la presencia de nuestros fiscales en audiencias, que era una queja de la población, del mundo litigante. Hemos desarrollado un trabajo colectivo, conjunto, corporativo, donde los fiscales que trabajan en grupos de tres no permiten que haya una suspensión de audiencias realizan un trabajo corporativo en los actos investigativos, entonces es un mejor trabajo y más efectivo.

En estos años dirigiendo la Fiscalía, ¿qué aspectos puede resaltar que realmente le ha costado trabajo pero al mismo tiempo le enorgullece haberlo hecho?
Hemos dado identidad al Ministerio Público. Antes el Ministerio Público era la quinta rueda del carro, antes el Ministerio Público estaba subordinado al poder judicial, a algunos ministerios como del Interior o de Gobierno; hoy no, hoy el Ministerio Público tiene una identidad propia. Tiene una identidad constitucional y ese trabajo se realiza en base a esas atribuciones que tiene y eso molesta a algunos que quieren ser protagonistas de todo, molesta que el Ministerio Público tenga voz propia, tenga identidad y que realmente ejerza esa dirección funcional de la investigación.
Hoy aparecen los que quieren ser todo a la vez: fiscalía, policía, juez y hasta emiten sentencia y eso no es así, lo que debe existir es una coordinación cada uno cumpliendo su rol, su atribución y es eso.
El fiscal tiene un lugar aunque a muchos no les guste y eso es un avance fundamental en cuanto al trabajo y desarrollo del Ministerio Público. Hemos avanzado en cuanto a infraestructura pese a las limitaciones presupuestarias que se tiene en cuanto a tecnología.
Hemos desarrollado un nuevo modelo de investigación fiscal a partir de seminarios internacionales, de conversatorios con especialistas, reformas de ministerios públicos o de justicia en América Latina y eso nos ha permitido construir un criterio colectivo, amplio, de una visión para avanzar en la transformación de la justicia que en cierta medida fue asumido por el nuevo código del sistema penal que fue abrogado.
Faltan muchas cosas por hacer, por supuesto, hemos iniciado una nueva carrera fiscal, con la capacitación, la formación de nuestros nuevos cuadros fiscales en la escuela que tenemos, entonces eso debe continuar, se debe llegar a una total institucionalización de toda la Fiscalía, pero hemos dado pasos importantes.

¿Usted se irá posesionando a fiscales institucionalizados, por lo menos a los departamentales?
Esa es la idea para este año, queremos institucionalizar las fiscalías departamentales, tenemos fiscales de la nueva carrera fiscal, entonces por supuesto que vamos a seguir trabajando hasta el último día que tengamos como mandato constitucional.

¿Cree que esa construcción de una Fiscalía con autonomía ha sido mal interpretada por algunas autoridades y dio lugar a ese roce entre instituciones?
Yo veo de una manera más grande como estructura de Estado, es normal que existan algunos puntos de desacuerdo en algunos temas, son temas de visiones que hay respecto a cómo se encara el trabajo, pero cada uno tiene su función y su atribución constitucional legal que el propio procedimiento nos otorga, nos faculta, no podemos salirnos de ese marco.
Antes de estar en temas minúsculos como algunos se ocupan, para mí es más importante llegar a la verdad histórica de un hecho, esclarecer un hecho antes que andar presentando a personas, especulando con hipótesis que a veces no se da en la realidad, o sea, nosotros encaramos de esa manera nuestro trabajo en el Ministerio Público.
Otro avance importante, es que hemos cambiado los paradigmas que había. Antes ¿quién era el mejor fiscal? El que atropellaba derechos y garantías de las personas, el que tenía más personas cauteladas, ese era el mejor fiscal; pero hoy hemos cambiado ese paradigma donde el mejor fiscal es el que respeta los derechos humanos, el que plantea salidas alternativas hacia una justicia restaurativa, el que coordina y vela porque se defienda los derechos de la sociedad.

Se ha avanzado bastante en la depuración de los “malos fiscales”, sin embargo resta todavía mucho trabajo. ¿Qué aspectos no le han impedido avanzar más?
Uno de los obstáculos que hemos tenido es que en la Ley del Ministerio Público se ha introducido un reconocimiento a la antigua carrera fiscal y hay varios de estos —no todos— que se creen intocables, se creen que tienen permiso para hacer lo que ellos quieran y eso no es así.
Lamentablemente, hemos chocado con eso, hemos querido hacer cambios, ajustes, y no hemos podido porque nos planteaban (recursos) jerárquicos, nos planteaban amparos que no han permitido que avancemos en esa situación; pero donde se ha podido, hemos sido implacables a la hora de sacar a gente corrupta, que no estaba comprometida con el trabajo del Ministerio Público y jamás nos ha temblado la mano a la hora de realizar una limpieza del Ministerio Publico.

¿Qué va a pasar con usted después de octubre, cuando deje la Fiscalía General?
Quiero terminar mi gestión, seguramente veremos, yo siempre he sido una personas que necesita trabajar, que tiene familia, yo he vivido y vivo de mi sueldo, no tengo otros ingresos.
Yo no me he enriquecido un peso en el Ministerio Público, jamás he recibido un centavo que no sea mi sueldo, entonces, seguramente voy a ver hacia adelante qué actividad voy a desarrollar. Voy a cumplir y siento que estoy cumpliendo y he cumplido con mi patria, con la justicia como servidor, donde he estado lo he hecho así y espero todavía estos nueve meses que me quedan poder seguir desarrollando un trabajo en el Ministerio Público.

¿Seguirá en el ámbito de la justicia?
La experiencia que tengo, la formación de haber dirigido la Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos por dos años me ha permitido tener una serie de relacionamiento con fiscalías de Iberoamérica, con otros organismos, me ha permitido tener una visión mucho más amplia de lo que es la reforma de la justicia, los avances que se tiene la institucionalidad.
Entonces, todas esas actividades me han permitido tener varios contactos a nivel internacional, varios amigos que he hecho en este tiempo y, sin duda, es un plus en su formación hasta persona profesional, entonces seguramente vamos a ver alguna situación así.
Yo soy un convencido que uno de los temas pendientes es la revolución de la justicia, la transformación de la justicia en el país, y es algo que la gente pide pero, además, es una demanda insatisfecha de la sociedad. Sin embargo, hemos aportado desde el Ministerio Público, hemos puesto el granito de arena que esperamos continúen las nuevas autoridades.

FICHA PERSONAL

José Ramiro guerrero. Fiscal General del Estado
Fecha de Posesión: 23 de octubre de 2012
Fecha de nacimiento: 24 de junio de 1971
Lugar: Puna, Potosí
Profesión: Abogado
Estudió en: Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca

Frases

"Los fiscales ya no somos la quinta rueda del carro, los fiscales tenemos identidad, los fiscales realizamos una labor fundamental en la investigación".
"La inversión en el IDIF fue de 180 mil bolivianos del 2008 al 2012, en estos últimos cuatro años, del 2013 adelante hemos invertido más de 29 millones de bolivianos".
"La Fiscalía ha dado pasos importantes en la transformación, en el cambio de justicia penal, y por eso hoy está preparado para afrontar retos de transformación sea con ese código o con otro".
"Cuesta cambiar paradigmas, tal vez es lo que más cuesta porque una infraestructura, equipamiento se lo puede adquirir, pero un cambio de mentalidad cuesta, es un proceso largo".

EL ENCUENTRO CON EL PAPA “MARCÓ MI VIDA”

El fiscal general, Ramiro Guerrero, destaca como parte fundamental de su vida personal y profesional el encuentro que tuvo con el papa Francisco en diciembre de 2016 en el Vaticano.

“El encuentro con una persona tan sencilla, humilde pero tan profunda a la vez en sus reflexiones. He tenido la oportunidad —tal vez que muchos no han tenido— de estar más de 70 minutos conversando con el papa Francisco. Para mí es algo inolvidable reflexión y visión que él tiene respecto a la justicia. Él nos decía sigan, sigan luchando, peleando, en el camino recibirán palazos, golpes pero no desmayen, sigan luchando por una verdadera justicia”.

Agregó que el mensaje que le dio el Papa marca el compromiso que uno tiene desde siempre, “entonces, sin duda ese es un tema fundamental que ha marcado mi vida”.