Iglesia convoca a encuentro de líderes eclesiales que abordará crisis de abuso sexual a menores
LA PAZ |
El Papa Francisco hizo un llamado a todos los presidentes de las Conferencias Episcopales del mundo para llevar adelante el encuentro sobre protección a menores donde se abordará el tema de los abusos sexuales, se realizará en el Vaticano del 21 al 24 de febrero.
La razón para desarrollar esta iniciativa inédita es afrontar y aceptar la crisis de los abusos cometidos a menores por parte del clérigo.
Francisco quiere acabar con la idea de que ante un caso de abuso, la prioridad de los obispos sea defender el buen nombre de la Iglesia, sino establecer tolerancia cero en estos casos y tomar conciencia del drama y del sufrimiento de las víctimas del abuso sexual de un menor.
En este sentido y a lo largo de tres días los obispos mediante los testimonios de víctimas y expertos abordarán tres puntos claves: Responsabilidad, Dar cuentas y Transparencia.
Responsabilidad, es decir, discutirán las responsabilidades pastorales y jurídicas del obispo frente al tema de los abusos. Dar Cuentas, se entiende que el obispo o superior de una orden debe informar sobre su trabajo en la materia también se refiere a rendir cuentas no solo por el abuso, sino por encubrir el hecho. Transparencia, a nivel interno, pero también y sobre todo, a un nivel externo, informando a las autoridades y al pueblo de Dios sobre los casos de abuso.
"Algunos obispos no entendían bien o no sabían qué hacer, o hacían una cosa buena y otra equivocada (... )Que sepan qué deben hacer, que conozcan el procedimiento", señaló el Papa Francisco ante los medios al referirse a la Cumbre.
En ese sentido, la Iglesia reconoce que en tres días no se dará solución a las crisis de los abusos sexuales por la que atraviesa, pero se buscarán modos y herramientas para reforzar las normas jurídicas de protección y su aplicación. Participarán del encuentro 190 personas, entre ellas 114 presidentes de conferencias episcopales, 14 líderes de Iglesias orientales, 12 superiores de órdenes religiosas, y 10 superioras de órdenes religiosas femeninas.
Mientras el papado de Juan Pablo II el Vaticano hizo caso omiso de las acusaciones de abuso que surgían con fuerza. Fue hasta 2002 que en Boston, Estados Unidos, se desató un escándalo que obligó a los líderes eclesiales reconocer que existía un problema y que este que afectó su credibilidad.
Cuando Benedicto XVI fue elegido pontífice tomó acciones contra varios de obispos, pero con la llegada del Papa Francisco, en 2013, se instituye la Comisión Pontificia para la Protección de Menores, con la misión de estudiar y proponer modos y soluciones eficaces para de proteger a los menores en los distintos ámbitos de la Iglesia.