Humor
Entra una señora a la carnicería y dice:
—Deme esa cabeza de cerdo de allí.
Y contesta el carnicero:
—Perdone, señora, pero eso es un espejo.
¿De qué murió la mujer del capitán Garfio?
De una caricia.
En el médico:
—Doctor, me duele esta pierna.
—Eso es cosa de la edad.
—Ya, doctor, pero esta otra pierna tiene la misma edad y no me duele…
Llega un trabajador a la casa de una señora y le dice:
—¡Señora, su esposo estiró la pata!
—¿Qué?
—Su esposo murió.
—Pero ¿cómo?
—Le cayó un ladrillo en la mano.
—¿En la mano?, pero entonces, ¿cómo murió?
—Es que le cayó cuando se estaba rascando la cabeza.
Llega Pepito con su mamá y le dice:
—Mamá, mamá, en la escuela me dicen mentiroso.
—Ay Pepito, si ni siquiera vas a la escuela.