Fin de semana de alto voltaje
DPA y AFP
Unos 12.000 policías serán desplegados en la región de París para salvaguardar el orden en un fin de semana de alto voltaje en el que mañana se celebra el Día de la Bastilla y el domingo se disputa la final del Mundial de fútbol entre Francia y Croacia, anunció el jefe de policía Michel Delpuech.
La Torre Eiffel cerrará los dos días ya que las autoridades preparan para mañana los tradicionales fuegos artificiales que señalan el Día Nacional de Francia y también la instalación de una pantalla gigante para ver el partido en Rusia. "Por motivos de seguridad, la prefectura de Policía de París pidió el cierre de la Torre Eiffel", anunció la Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel (SETE).
La dirección del monumento emblema de la capital gala informó que se devolverá el dinero "en un plazo de dos meses" a los turistas que ya tuvieran comprada su entrada para el domingo.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, había anunciado ya que con motivo de la final del Mundial se iba a instalar una pantalla gigante en la Torre Eiffel, con otras pantallas secundarias en el Campo de Marte (los jardines a sus pies).
La Torre Eiffel es uno de los lugares más visitados de la capital. En 2017, vendió 6,2 millones de entradas, por más de 7 millones en 2014, que continúa siendo el año récord.
Los jardines del Campo de Marte, al pie de la famosa torre, estarán listos para albergar a 90.000 fans que se reunirán para ver el encuentro en diversas pantallas, advirtieron las autoridades locales.
El martes por la noche, una zona más pequeña junto al Ayuntamiento en el centro de la ciudad alcanzó su capacidad máxima de 20.000 espectadores mucho antes del comienzo del partido de semifinales entre Francia y Bélgica.
Las autoridades francesas han impuesto estrictas normas de seguridad para cualquier retransmisión pública de los partidos del Mundial con objeto de evitar ataques terroristas.
Más de 230 personas fueron asesinadas en Francia en 2015 y 2016 como consecuencias de atentados islamistas, incluidas 86 atropelladas por un camión en el paseo marítimo de Niza el Día de la Bastilla hace dos años.
