Al Atlético de Madrid le toca el hueso más duro
Atlético-Juventus. A veces penaliza acabar segundo de grupo en la primera fase de la Liga de Campeones. El club anfitrión de la final del torneo, que se disputará el 1 de junio en el Wanda Metropolitano, se enfrentará en la ronda de octavos a la temible Juve, cuyas aspiraciones al título se han reforzado con el fichaje de Cristiano Ronaldo después de perder las finales de 2015 contra el Barça y de 2017 ante el Madrid.
Y Liverpool-Bayern Múnich. Ocurre que en ocasiones tampoco sirve de mucho terminar primero, como quedó demostrado con el emparejamiento del campeón alemán con los ingleses de Anfield, el rival que no quería ninguno de los líderes, que cuentan con el factor campo a favor en una ronda que empezará el 12 de febrero y acabará el 13 marzo.
Ambos son los cruces más relevantes del sorteo celebrado en Nyon y que deparó un triple enfrentamiento Inglaterra-Alemania. Acaso hay una tercera eliminatoria fuerte: Manchester United-Paris Saint Germain. Las aspiraciones de los franceses, a los que se les exige que compitan por la corona continental, están amenazadas por un mal enemigo como es el equipo de Mourinho, ya descolgado de la cabeza de la Premier y en cambio peligroso en los torneos a doble partido como la Copa de Europa.
Los demás favoritos salieron bien parados, sobre todo el Real Madrid y el Barcelona. A los madridistas, actuales tricampeones, ganadores de cuatro de las últimas cinco ediciones, les aguarda una excitante eliminatoria con el rejuvenecido Ajax de De Jong y De Ligt, dos de los jugadores más apetecidos del mercado en Europa.
La experiencia también es una garantía para el Barça en su reencuentro con el Olympique de Lyon, el club de Umtiti. Aunque no pasaron del empate en cancha gala, nunca perdieron los azulgrana en sus tres eliminatorias anteriores con el hoy tercer equipo de la Liga en Francia. El Olympique, sin embargo, ha completado una fase de clasificación exquisita contra equipos especialmente fuertes como el Hoffenheim, el Shakthar y el City, al que ganó en el Etihad en el estreno (1-2) y empató en Lyón.
La emoción parece garantizada en cambio en los emparejamientos Tottenham-Borussia Dortmund y Roma-Oporto. La tensión, en cualquier caso, se centrará en dos duelos tremendos: Atlético de Madrid-Juventus, o si se quiere Griezmann-Cristiano Ronaldo, y Liverpool-Bayern Múnich, una confrontación de históricos, cinco veces campeones cada uno y que pasan por momentos antagónicos: los reds se han rejuvenecido con el alemán Klopp en el banquillo, al tiempo que envejece el club de Baviera.
La final se celebrará el día 1 y la fase de octavos se iniciará el 12 de febrero con el Manchester United-PSG para acabar el 12 de febrero con el Atlético-Juventus. Habrá que ver el pico de forma de los equipos en febrero y marzo y, sobre todo, constatar la incidencia que tendrá el VAR, una aplicación que puede modificar también los pronósticos que de momento apuntan a favor del PSG, Real Madrid, Barcelona, Liverpool, City y Juventus.
1 de junio es la final. El estadio Wanda Metropolitano del Atlético de Madrid será escenario de la definición de la corona.
RIVALES CON PEDIGRÍ EN LA LIGA EUROPA
El sorteo de los dieciseisavos de final de la Europa League ha deparado desiguales emparejamientos para los cuatro equipos españoles: Celtic- Valencia; Rennes - Betis; Lazio - Sevilla; y Villarreal - Sporting.
El Sevilla, pentacampeón del torneo, no tuvo demasiada fortuna, puesto que le tocó uno de los peores rivales posibles como es el Lazio, quinto clasificado de la Serie A y un equipo con un importante potencial.
El Villarreal tampoco tuvo mucha suerte. Su enfrentamiento ante el renacido Sporting de Lisboa será complicado. El equipo que ya dirige Luis García Plaza no pasa por su mejor momento en LaLiga, aunque tiene tiempo para llegar en mejores condiciones al torneo.
Valencia y Celtic de Glasgow jugarán una bonita eliminatoria. El conjunto que dirige Marcelino ganó esta competición en 2004 y es favorito ante el cuadro escocés, un histórico campeón de Europa en 1967 aunque ahora venido a menos.
En el Betis se ha recibido con cierta precaución el emparejamiento con el Rennes, el único equipo que sobrevive del fútbol francés en esta competición. Actualmente es el 11 en la Ligue 1, una muestra de su carácter irregular. No obstante, en el Betis destacan el físico de un equipo que está capitaneado por un clásico del fútbol galo: Ben Arfa, internacional por Francia y ex del PSG.