Inglaterra domina el continente europeo
Uno, dos, tres, cuatro. Pleno inglés en las finales de las dos competencias continentales en Europa. Liverpool y Tottenham después de sendos milagros serán los protagonistas de la definición de la Champions League, el 1 de junio próximo en Madrid. Y Arsenal y Chelsea irán por el título en la Europa League, el 29 de mayo en Bakú. Una situación inédita en la historia de las competencias del Viejo Continente. Aunque también una situación que tiene algo de lógica.
Es que los especialistas aseguran que la Premier League inglesa es la mejor del póker de ligas top del mundo, por encima de España, Italia y Alemania.
¿El motivo? Sencillo: es la más competitiva porque tiene seis equipos de altísimo nivel, a contramano de lo que sucede en España, donde el poder alterna entre dos o tres (Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid), en Italia (donde es un monólogo del octacampeón Juventus) y en Alemania (donde manda casi sin despeinarse el todopoderoso Bayern Múnich).
El alto nivel de los equipos de la Premier se traduce en este predominio absoluto en las competencias continentales. Sin embargo, se encuentran varias peculiaridades entre los cuatro finalistas.
Por empezar, Manchester City, que levantó su sexto título de la Premier League con una ventaja de un punto sobre el Liverpool, no está entre los cuatro súper finalistas europeos.
Otra curiosidad: Liverpool, que se quedó con el subcampeonato de la Premier League, definirá la Champions League con el Tottenham de Mauricio Pochettino, al que no sólo le ganó los dos partidos que jugaron por la liga local, sino que también le sacó 28 puntos de luz en el certamen inglés.
Más parejo, en la previa, luce el choque entre Chelsea y Arsenal. Los Blues terminaron terceros en la tabla con 72 puntos, mientras que los Gunners acumularon 70 y se ubicaron en el quinto escalón.
¿Antecedentes? La definición entre Liverpool y Tottenham será la segunda entre equipos ingleses en la Champions. La anterior fue en 2008 entre Manchester United y Chelsea.
Será la novena aparición para los Reds, que ganaron la Orejona en cinco oportunidades y se quedaron en el borde de la gloria en las otras tres ocasiones —la última en la pasada edición, ante Real Madrid—. Para los Spurs de Mauricio Pochettino será la primera vez. Lo más lejos que había llegado había sido a las semifinales en 1962.
También hay un único precedente de finales entre ingleses en la Europa League —antes llamada Copa de la UEFA—. Fue en 1972 con Tottenham y Wolverhampton Wanderers como protagonistas. Se trató de la primera definición animada por dos equipos de un mismo país. En la definición de la Europa League también hay uno que probó las mieles de la gloria y otro que no. Chelsea se quedó con el torneo en la edición 2012-2013, mientras que Arsenal tuvo una oportunidad y la dilapidó cuando perdió por penales con Galatasaray en la definición de la copa de 1999-2000.
Sarry y Emery, villanos
Y si Júrgen Klopp (Liverpool) y Mauricio Pochettino (Tottenham) son venerados ahora en sus clubes, no se puede decir lo mismo de los técnicos que se enfrentarán en la Europa League.
El italiano Mauizio Sarri, en el Chelsea, y el español Unai Emery, en el Arsenal, han vivido una temporada de estreno más bien para el olvido. Aunque un título europeo bien puede servir para redimirlos.
Sarri, constantemente criticado por el estilo de juego que impuso en el Chelsea, ha sido cuestionado por sus aficionados y hasta desafiado por sus jugadores.
Y es que su autoridad se tambaleó después del encontronazo protagonizado por el español Kepa, que llegó al equipo de Londres como el arquero más caro del mundo.
Y Emery, por su parte, tampoco ha tenido una gran temporada, pese a su buen arranque.
JÜRGEN KLOPP Y MAURICIO POCHETTINO, LOS HÉROES
Una cosa distinguió, además del juego, a los dos flamantes finalistas de la Champions. Sus dos entrenadores, Jurgen Klopp y Mauricio Pochettino, son reconocidos por propios y extraños por su capacidad.
Klopp ya sorprendió a Europa al llevar a su Liverpool a la final en la pasada temporada, superando a equipos como el Oporto, el Manchester City y la Roma.
El entrenador alemán todavía no tiene una trayectoria muy larga como otros directores técnicos consagrados, pero sí logró colocar de vuelta al Liverpool en los primeros escalones del fútbol mundial y antes hizo lo propio con el Borussia Dortmund.
Pochettino empezó como director del Espanyol de Barcelona, al que tomó en zona de descenso en 2009 y de a poco se ganó el reconocimiento como estratega.
Desde 2014, es el entrenador del Tottenham.
UEFA LANZA PROPUESTA PARA LA CREACIÓN DE LA NUEVA CHAMPIONS
El torneo que genera más pasión entre los aficionados de todo el mundo sin duda es la Champions League. A lo largo del año futbolístico, los mejores clubes de Europa se enfrentan durante la fase de grupos y luego en rondas de eliminación directa hasta conocer al campeón.
A pesar del éxito que la Champions League genera año con año, los directivos no se sienten conformes y han lanzado una propuesta para modificar la competencia. El presidente Aleksander Ceferin aseguró que la Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol (UEFA, por sus sigla en inglés) está trabajando en una nueva Liga de Campeones.
El nuevo modelo de Champions League iniciaría sus actividades a partir de 2024, y la principal modificación estaría en reducir a cuatro el número de grupos. Cada uno de éstos estaría compuesto por ocho clubes que también podrían pelear por el ascenso y descenso en las categorías inferiores.
Esta modificación le asegura 14 partidos a cada uno de los clubes en la fase de grupos, y a partir de los octavos se jugaría como se conoce actualmente. Esto significa que los dos equipos que alcancen la gran final pasarían de jugar 13 a un total de 21 encuentros.
La UEFA también propone un sistema de ascensos y descensos al finalizar la temporada. Los equipos de segunda división (Europa League) podrían subir de categoría (Champions League), o caer a una tercera división que ya fue aprobada por el organismo.
El diario L’Équipe detalla que el último lugar de cada grupo desciende automáticamente a la división inferior. Los ubicados en el sexto y séptimo puesto jugarán un repechaje para que al final del torneo sean ocho los equipos que pierdan la categoría o consigan el ascenso. Con esta propuesta, la UEFA elimina toda posibilidad de sustituir a la Champions con una Superliga europea entre los equipos de élite del continente.