Wilster busca su primera victoria en el Clausura
Hoy finalmente se completará la fecha 3 del torneo Clausura, cuando Wilstermann y San José se enfrenten desde las 15:00, en el estadio de Sacaba, Capitán José Angulo.
Esta fecha se disputó a fines del mes pasado, pero el plantel aviador solicitó la reprogramación para el 8 de agosto, porque estaba en plena competencia en la Copa Sudamericana. Pero este clásico nacional sufrió otra modificación, porque San José jugó recién el lunes ante Guabirá el cotejo que debía disputarse el domingo.
Por encima del tema económico, la dirigencia decidió aceptar la solicitud del cuerpo técnico aviador de no mover el cotejo para el 22 de agosto, y jugarlo hoy en el estadio de Sacaba.
Wilstermann aún no conoce de victorias en el presente campeonato, motivo por el que el encuentro de hoy reviste de importancia, porque no puede dejar escapar más puntos de casa.
Aunque el estratega aviador, Álvaro Peña, no permite que la prensa esté presente las prácticas en las que ensaya con el posible once titular, se conoce que para hoy no existirían cambios en relación al equipo que salió desde el vamos en el empate (0-0) ante Destroyers, el sábado pasado.
Sobre todo porque aún no puede contar con algunos jugadores usualmente titulares. Es el caso del lateral izquierdo Juan Pablo Aponte, que tiene luxados ambos hombros, y el delantero Ricardo Pedriel, que está en proceso de fortalecimiento físico tras la operación en su rodilla.
Wilstermann pretende recuperar terreno en los partidos pendientes que tiene, primero ante San José, por la fecha 3, y el miércoles 15 de agosto ante Guabirá, por la jornada 4. De sumar los seis puntos, podría situarse media tabla para arriba, con ocho unidades.
Entre tanto, San José debe sólo este cotejo, pero tampoco la está pasando muy bien en el torneo. La última derrota ante Guabirá lo dejó en la séptima posición con seis puntos.
El técnico santo, Eduardo Villegas, aseguró que el equipo está disminuido, no sólo por las lesiones que tiene en el plantel, sino porque algunos jugadores dejaron la institución, es el caso de Galindo y Tancredi.
Pese a ello, la única variante confirmada es el ingreso del juvenil Jesús Careaga en el arco en reemplazo del expulsado Carlos Franco.
El estratega valluno aseguró que Careaga tiene su confianza, además que el segundo golero Gustavo Salvatierra, está lesionado.
WILSTER POSTERGA PARTIDO ANTE REAL
Pese a que la comisión técnica de la Federación Boliviana de Fútbol ya había anunciado que el cotejo entre Wilstermann y Real Potosí, programado para este sábado 11 de agosto, sólo era modificado en el horario, que pasaba de 17:15 a 15:00, ayer sorpresivamente se conoció que el plantel aviador hizo la solicitud de reprogramar ese encuentro, y que se aceptó el pedido.
En tal sentido, el partido fue reprogramado para el miércoles 5 de septiembre, con horario aún por definir. Para esa fecha, el club Wilstermann espera contar a disposición el Félix Capriles. De ser así, el encuentro se disputaría en horario nocturno; de lo contrario, contenderá con los lilas en la tarde, en el estadio Capitán José Angulo, en Sacaba.
ROJOS ADVIERTEN QUE EN LA SIGUIENTE HABRÁ DENUNCIA
Wilstermann advirtió en una nota enviada al club Destroyers, a través de la Federación Boliviana de Fútbol, que si existiera otro incidente de insultos racistas a sus jugadores, harán la denuncia respectiva.
“El jugador Serginho, de nuestro primer plantel, fue reiteradamente agredido verbalmente con insultos de todo calibre, entre los que destacan ‘mono’ y ‘macaco’, aludiendo a su color de piel y nacionalidad”, dice en primera instancia la nota, para después poner en evidencia que, pese a la “notoriedad” del hecho, el árbitro del cotejo, José Jordán, no observó el mismo.
“Hacemos notar nuestra indignación y preocupación por la materialización de este tipo de conductas reprochables por parte de su hinchada, a quienes deberá apercibirse (advertirse) observen una conducta diferente a la señalada, bajo la alternativa de que, si se repite, se dará curso a la denuncia y a la aplicación de las sanciones estipuladas”, señala la carta.
El código disciplinario de la Federación Boliviana de Fútbol, en su artículo 88, estipula duras sanciones a las personas que comentan algún tipo de accionar racista durante un encuentro deportivo, que van desde una multa de 15.000 a 25.000 dólares, además de suspensiones de cinco partidos, o incluso el descenso de categoría. Para iniciar el proceso debe existir una denuncia, algo que ahora no se hará.