10 claves para disfrutar de la película boliviana “Søren”
“Søren”, la última producción del destacado cineasta paceño Juan Carlos Valdivia, fue estrenada el pasado jueves en todas las salas del país. El director accedió a una entrevista con Doble Click para conocer todos los detalles del filme y recopilamos 10 datos claves -sin espoilers- para disfrutar mejor de su proyección .
1. No es una historia inspirada en los padres de Juan Carlos Valdivia
La historia de los protagonistas Amaru y Paloma no tiene nada que ver con la historia de los padres del director como se lo había planteado anteriormente.
“No tiene tanto que ver ni la anécdota ni la historia, sino los personajes. No es un homenaje a ellos, pero sí la esencia de los personajes está inspirado en ellos. Mi padre era un hombre muy fiestero, muy alegre, muy extrovertido, mi madre era una mujer mucho más introvertida. Las características de la pareja son como ellos pero no la historia, no creo que a mis padres les hubiera gustado eso”.
2. Por qué el título
Si bien Søren está inspirada en el amor del filósofo del mismo nombre, el por qué de titular así la película va por otro lado.
“Yo estaba en París. Allí, en el barrio latino hay una librería de libros en inglés, recuerdo que era invierno y había mucha nieve y viento y yo a lo lejos cruzo el puente y veo una luz dorada. Esa era la vitrina de la librería que resaltaba un libro de Søren Kierkegaard que titulaba ‘Love’, así en letras grandes, entonces compro ese libro y me enamoré de la filosofía de Kierkegaard.
3. Un cine de autor
Søren es la tercera parte de la trilogía que comenzó con “Zona Sur” (2009) y continuó con “Yvy Maraey” (2013). Los tres filmes son una exploración espacial y una construcción de atmósferas, más que como en un drama de causa y efecto. La estructura elíptica contribuye más a generar preguntas que respuestas.
4. El “tipo de amor” que trata el filme
En 1840 Regina, que tenía 17 años, hizo su confirmación religiosa, lo que le posibilita comenzar una relación con su esperado amor, el filósofo Søren Kierkegaard.
“Kierkegaard cambia su historia personal al no casarse con una mujer que amaba, nunca se casó pero pudo haberse casado. A partir de Kierkegaard -y luego viene Nietzsche- es que el ser humano empieza a tomar las riendas de su vida y decidir qué hacer con lla, ese es un concepto nuevo, anteriormente eso no existía. Ahí está el espíritu de Kierkegaard en la película, es lo que le pasa a una pareja y las decisiones que tienen que tomar sobre su vida que termina siendo existencial”.
5. Cómo se concibe la película
“Pienso que el amor es todo en la vida, absolutamente todo. Justo antes de hacer Søren me diagnosticaron depresión. Fui a hacerme constelaciones y me dijeron que no necesitaba hacer aquello porque estaba deprimido. Consulté con tres psiquiatras y todos concluyeron en que tenía depresión. Esta es mi película, de alguna manera, para salir de esa depresión. Y una de las cosas que aprendí es que la depresión no es más que falta de amor”.
6. Conexión trascendental
Søren está ambientada en una Bolivia contemporánea globalizada, donde las múltiples culturas, los cambios sociopolíticos y la búsqueda de un estilo de vida individual son los escenarios de un viaje de descubrimiento.
“Es una película que tiene que ver con ‘conectar’. Creo que lo que estamos buscando en el mundo contemporáneo es conectar, quizá estamos muy solos y tenemos los aparatos tecnológicos que nos conectan, pero lo que más se valora hoy en día es esa conexión natural. Entonces son personas (Amaru y Paloma, protagonistas de la película) que están buscando conexiones, una cercanía con la madre tierra, con la naturaleza, que son menos materialistas”.
7. “Una historia de amor en una Bolivia que deslumbra”
Los afiches oficiales de la película destacan la frase “Una historia de amor en una Bolivia que deslumbra”.
“Eso es más una cosa de marketing que me han pedido que lo pongamos los distribuidores, y de hecho vino de un colega mío que es Paolo Agazzi, quien vio la película y dijo ‘la historia se ve en un país deslumbrante’. Y sí, yo amo a este país y mis películas siempre han sido muy estéticas y pienso que somos un país fabuloso de gente hermosa y veo un país muy bello.
Tiene que ver con la experiencia, los jóvenes hoy en día son más viajeros y está en su espíritu”.
8. Diversidad boliviana
Juan Carlos Valdivia muestra la diversidad boliviana en el casting de sus actores (cruceños, orureños, paceños y cochabambinos) y en los parajes que ambientan su película (Rurrenabaque, el salar de Uyuni, el lago Titicaca y los cholets en El Alto).
9. Música
La banda sonora de la película está compuesta por el grupo cochabambino Chicas Delfín, con un estilo de rock experimental con influencias del punk y new age.
10. Costo
La película tuvo un costo total de 677 mil dólares.