Luis Zilveti: “Lo que estoy haciendo es dejar de ser para llegar a ser”
Luis Zilveti es un reconocido muralista y pintor paceño que cuenta con más de 50 años en el ámbito artístico, con mayor precisión en el arte abstracto.
El pintor, que reside en París, asegura que la vinculación con el país siempre está presente, mas no en sus pinturas con una lógica folklórica.
Asimismo, rechaza las obras decorativas o ilustrativas y que lo que él busca es, más bien, que el espectador pueda encontrar un algo “más allá de la misma pintura”.
¿Qué representa para usted mostrar su obra en Bolivia?
Mucho, porque considero que es con la gente que mejor dialogo y veo que les interesa ver, porque la pintura es un diálogo, es una pregunta en que el espectador contribuye. Yo considero que la pintura que no tiene esa condición de poder dialogar se queda en la decoración, en una pintura decorativa que sólo sirve, como el nombre indica, para decorar un muro.
¿Cómo define usted su arte?
Generalmente en la historia de la pintura, son los otros los que han definido, que han dicho lo que dice la pintura. Pero ya que me lo pregunta a mí, yo creo que es interesante poder observar lo que he estado haciendo desde mi primera exposición en 1960 hasta ahora donde encuentro diferencias evidentemente. Pero ha habido una preocupación, si bien al comienzo ha sido intuitivo, ahora es más racional de una abstracción de la figura. No pienso que se pueda decir que es figurativa o es abstracta; abstracta quizás pero en el buen sentido de la palabra, lo que pasa es que ahora se entiende por abstracción como la desaparición de la figura, pero, como su nombre lo indica, es llegar a una síntesis, realmente lo mínimo del sujeto, en este caso es una abstracción de la figura.
¿Usted cree que en esta muestra se ve una evolución o variación en su estilo?
Evidente. Imagínese que si desde 1960 estaría haciendo lo mismo, sería realmente anacrónico. Indudablemente que han habido cambios, evoluciones y han habido también momentos más cercanos a la abstracción y momentos más cercanos a la figuración, pero siempre en ese afán de una búsqueda de encontrar lo esencial, lo más importante del sujeto que estoy pintando.
Me puede contar un poco de su experiencia como pintor, empezar aquí en Bolivia y luego migrar a Francia, ¿qué representó esto para usted?
Representó mucho, no tanto por la cultura europea que pudo haber significado una influencia en lo que yo estaba haciendo, sino más bien para tener la posibilidad de tener perspectiva y ver mi contexto a la distancia con mayor exactitud, mayor claridad. Para mí eso ha sido muy importante y también el encuentro con pintores de otros países del mundo, porque París es cosmopolita. Sobre todo en los años 80 ha habido mucha actividad para nosotros los que éramos latinoamericanos, ha servido para hacer más consciencia en lo que soy y lo que sigo siendo: latinoamericano, con una serie de elementos que son generales.
¿Cómo es ver a Bolivia desde afuera, desde Europa?
Interesante, porque se puede ver todo lo bueno con mayor claridad y lamentablemente lo malo también, pero justamente con cierta perspectiva.
¿Cree que eso se refleja en sus cuadros?
No creo, porque lo que se ve en la pintura en esta retrospectiva es que yo lucho con la pintura vernacular o folklórica o anecdótica, justamente yo me alejo de todo lo que pueda ser o decorativo o ilustrativo. Hay pinturas en que la ilustración de una idea es más fuerte que la pintura en sí o la decoración es más fuerte que la pintura en sí. A mí lo que me interesa es tener, así como decía el que escribió “Detrás del espejo”, desde lo que se ve y se siente, lo que hay detrás de la pintura. Cuando uno está frente a una pintura tiene que haber algo, lo que los españoles dicen un duende, algo más que no se lo puede definir por la vista, es algo que se siente, es lo que yo llamaría el elemento que está detrás de la pintura, eso es para mí lo importante.
¿Y eso es lo que cada espectador puede encontrar?
Debería, si la pintura está más o menos lograda y es por eso que yo considero que esta retrospectiva no sea un punto final, todo lo contrario, es un descanso para comenzar un nuevo capítulo. Yo soy consciente que siempre estoy detrás de algo que trata de comprender la pintura y, claro, va a haber un momento que esto no va a seguir siendo así, porque voy a pasar a otro estado, como todo el mundo, así como pintor yo no le doy punto final a nada, para mí siempre es un comienzo.
Si me puede comentar un poco, ¿qué siente usted al pintar?
Qué siento yo al pintar, es una buena pregunta. Soy actor de lo que los existencialistas llamaban el devenir y es algo que está constantemente dejando de ser para llegar a ser, la pintura va, hay un trazo y ese trazo desaparece a una mancha, esa mancha desaparece para dar paso a… en fin, para mí es eso, siento que hay un devenir de la pintura, lo que estoy haciendo es dejar de ser para llegar a ser.
¿Algo que quiera agregar?
Sí, generalmente los artistas somos muy individualistas y olvidamos que estamos acompañados y los que acompañan a veces lo hacen pagando sufrimientos y alegrías. Entonces, un pintor, por lo menos en mi caso, le debe mucho a la compañía. Mi compañera ha sido y sigue siendo fundamental como observadora, sin ningún interés. Hay personas que más lo conocen a uno y más saben a dónde quiere ir uno, forzosamente su comentario y su crítica van a ser acertadas y va a ser en bien de uno. Así que yo le debo mucho a mi esposa.
PARA DESTACAR
La pintura es un diálogo, es una pregunta en que el espectador contribuye.
Yo lucho con la pintura vernacular o folklórica o anecdótica, justamente yo me alejo de todo lo que pueda ser decorativo o ilustrativo.
Soy actor de lo que los existencialistas llamaban el devenir, y es algo que está constantemente dejando de ser para llegas a ser.
HISTORIA
Estudios y trayectoria artística del maestro
Zilveti se formó en la Escuela de Bellas Artes Hernando Siles de La Paz en la década de los 60.
En 1968 fue becado a La Ciudad de Las Artes en París, ciudad que marcó varios hitos en su trayectoria, entre ellos su formación en grabado en el taller Friedlander, que luego complementó en el Taller del Instituto Brasileño en La Paz, espacio que dirigieron en su momento importantes artistas como el brasileño Rossini Pérez y María Esther Ballivián.
Maestros como Gil Imaná y Lorgio Vaca han sido sus antecesores, y por supuesto Graciela Rodo Boulanger y Alfredo La Placa, entre muchos otros.
Trayectoria entre figuras, abstractos y realidades
Fátima olivarez
Curadora de la muestra, MNA
Desde su primera exposición en el año de 1960, Luis Zilveti ha marcado el camino sensible y creativo de la esencia de sus sentimientos a través de presencias sutiles y efímeras, que traducidas a nuestra realidad son pasajes fieles del desarrollo social y cultural bolivianos, plasmados en composiciones de diferentes técnicas con siluetas y formas abstractas para ser leídas por el propio observador.
Las exposiciones realizadas a nivel nacional e internacional en museos importantes y galerías de arte, le han permitido ser reconocido como maestro del arte figurativo, por su búsqueda permanente de la esencia del ser humano; y como maestro del arte abstracto, por el lenguaje pictórico que genera a la vez significados y silencios poéticos.
El tiempo, los elementos del Universo y las fuerzas primitivas de todo ser, invitan a la imaginación humana para ver reconstrucciones de determinada realidad, demostrándonos la maestría de su arte a través de la trascendencia del color en sus óleos, los trazos transparentes en sus dibujos, las precisiones en sus grabados y la maestría en la composición de sus distintos murales realizados en Bolivia y otros países.
Exposición selección retrospectiva 1960-2018
El Museo Nacional de Arte (MNA) de la ciudad de La Paz iniciará las actividades de este año con la muestra “Luis Zilveti, selección retrospectiva 1960- 2018” que comprende alrededor de 30 cuadros que muestran la trayectoria del pintor desde su primera exposición.
“Es una selección, una retrospectiva limitada a cuadros que se encuentran acá en La Paz, en la colección del museo, en colecciones privadas y otros que me pertenecen”, aseguró el pintor.
El artista, quien reside en París, Francia, llegó al país para estar presente en esta exhibición que se inaugura oficialmente el viernes 19 en la Villa de París, la nueva ala habilitada en el MNA. La exposición estará instalada hasta el 18 de febrero.
El ingreso para la inauguración que se realizará a las 19:00 es gratuito.
La última exposición que realizó fue en octubre del año pasado en el Círculo de la Unión, también en La Paz.