Arias critica con su arte a la sociedad consumista
La adicción al consumo —dice el artista Orlando Arias— convierte al hombre en robot y en un ser dependiente de la tecnología cuyo fin será lamentable.
Siete de sus obras en acuarela y óleo, cuya temática es una crítica a la sociedad consumista, se exhiben en el salón Gíldaro Antezana, ubicado en la plaza 14 de Septiembre, esquina Bolívar. La muestra concluye el sábado.
Arias comenzó a trabajar con esta temática en 1995 y su propuesta fue evolucionando a través del tiempo, ya que en ese entonces se enfrentó con que el hombre sería cada vez más dependiente de las tecnología. Sus diferentes etapas titulan: “Ciberandinos”, “Homo evolutis”, “Teúrgia andina”, entre otras.
“En mi muestra, el hombre es simbolizado por seres robóticos que su accionar depende del movimiento tecnológico, dejando en lado los valores y la verdadera felicidad, una realidad que no está fuera del contexto actual y es una lamentable situación”.
“Visitantes del futuro” es una serie en la que recientemente trabajó y la expuso en el Centro Cultural Bomarzo de Jericó, Colombia, y es una continuidad a sus etapas en la que exhibe al hombre robótico futurista encontrándose con el hombre del pasado para intentar recuperar aquello que había perdido por el consumo, la tecnología y sus adicciones efímeras.
Sobre el artista
Nació en Toro Toro, Potosí, en diciembre de 1954, pero radicó en Cochabamba desde pequeño por razones familiares. Concluyó sus estudios en el colegio San Agustín y posteriormente ingresó a la carrera de Ingeniería Civil de la Universidad San Andrés de La Paz, pero por motivos de trabajo se cambió a Economía en la Universidad Técnica de Oruro (UTO).
Una tarde de 1976, Margarita, la esposa de su amigo Vicente Gonzales Aramayo, le enseñó pintar sobre una tela y la mezcla de colores. Había ido desarrollando su talento en la pintura y el dibujo desde que era niño, pero ésta era una nueva experiencia para él. La obra posteriormente se postuló al Concurso Nacional de Pinturas en Oruro y pasó a ser una de las seleccionadas.
Desde entonces supo que su talento por la pintura lo llevaría más lejos que una profesión universitaria. Investigó y experimentó, sin estudiar en escuelas de arte, sobre diferentes técnicas de la pintura hasta dominarlas.
En 1986 viajó a Ecuador para buscar un rumbo e investigar más sobre las artes. Años después, migró a Colombia, donde se estableció por 15 años. Posteriormente se fue a España para radicar por 15 años. Su arte y su espíritu aventurero —cuenta Araos— le posibilitaron ampliar su propuesta a diferentes escenarios y espectadores en cada lugar que visitó.
Ha perdido la cuenta de cuántos salones de arte ha pisado, pero estuvo en Perú, Ecuador, Costa Rica, Colombia, Panamá, Madrid, Italia, entre otros.
En su larga trayectoria ha recibido diferentes galardones por su propuesta contemporánea. El último fue mayo del año pasado, cuando le otorgaron el Premio Goya por excelente técnica en diversas texturas y su dominio del color en sus obras.
Llega esporádicamente a Cochabamba para presentar sus trabajos en muestras colectivas. La próxima exposición que realizará será en Costa Rica en enero y, a finales de 2019, participará en un encuentro de artistas plásticos en Panamá.
"Arte es más que copiar el modelo, es explorar en la creatividad. Ir más allá de lo que se conoce". Orlando Arias. Artista plástico