La “caja mágica” que extrae agua del aire del desierto
Efe Reportajes
Daniel Galilea
Un equipo de científicos de la Universidad de California, en Berkeley (UC Berkeley), ha ensayado con éxito, en el desierto estadounidense de Arizona, un sistema capaz de recolectar agua potable del aire sin otra energía que la luz del sol.
Este dispositivo absorbe agua durante la noche y, a través del calentamiento solar durante el día, la libera, para condensarla y recolectarla utilizando un nuevo tipo de material denominado "Estructuras metal-orgánicas" o Metal Organic Frameworks (MOF, por sus siglas en inglés).
Este exitoso ensayo de campo en Arizona permite demostrar que este sistema puede extraer agua potable todos los días y todas las noches, con una humedad muy baja y a un bajo costo, lo que lo hace ideal para las personas que viven en zonas áridas y con escasez de agua en todo el mundo, de acuerdo a esta universidad.
El científico Omar
Omar Yaghi, profesor de Química en la UC Berkeley (www.berkeley.edu), ha sido el inventor de la tecnología MOF subyacente a esta cosechadora.
Según Yaghi, este sistema "funciona a temperatura ambiente con la luz del sol, y puede recoger agua en el desierto sin recibir un aporte de energía adicional".
“Este viaje del laboratorio al desierto nos ha permitido conseguir que la recolección de agua pase de ser un fenómeno interesante a convertirse en una ciencia", recalca.
Material prodigioso
“Yaghi es un pionero en el desarrollo de los MOF, unos sólidos con tantos canales y agujeros internos que uno de estos materiales del tamaño de un terrón de azúcar podría tener una superficie interna del tamaño de seis campos de fútbol”, según Robert Sanders, director de comunicaciones científicas de la universidad californiana.
“Esta superficie absorbe fácilmente tanto gases como líquidos y, lo que es igual de importante, los libera rápidamente cuando se calientan”, añade.
Según Sanders, ya se están probando varios tipos de MOF, por ejemplo como una forma de introducir más gas en los tanques de los vehículos alimentados con hidrógeno, para absorber dióxido de carbono de las chimeneas y para almacenar metano.
El químico jordano-estadounidense Omar Yaghi recibió en 2018 el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de ciencias básicas por su trabajo en el desarrollo de estos materiales, capaces de capturar y almacenar dióxido de carbono, obtener agua del vapor atmosférico en zonas desérticas o desarrollar combustibles limpios basados en el hidrógeno.
Los MOF altamente porosos, que Yaghi desarrolló en la década de 1990 junto con otros materiales llamados COF, son como esponjas cristalinas a escala molecular, en las que el tamaño de los poros o celdas se puede definir en función de las necesidades, según esta entidad (www.premiosfronterasdelconocimiento.es).
Estos materiales reúnen muchas de las propiedades más deseadas por los químicos, entre ellas una gran capacidad de absorber otros compuestos, que se alojan dentro de sus poros.
SEPA MÁS
Un proyecto para aplicar en África
¿Dónde podría utilizarse esta cosechadora? Kapustin adelanta: “Oriente Medio, África del Norte e India se encuentran entre los primeros lugares donde esta tecnología podría ser aplicable, debido a la muy baja humedad relativa y a la abundancia de luz solar que hay en estas áreas”.
Se beneficiarán los países con estrés hídrico
“Más de un tercio de la población mundial vive en regiones con estrés hídrico, por lo que las implicaciones potenciales de esta tecnología para transformar la vida de las personas y mejorar las condiciones de salud pública mundial son enormes.