Con música, dulces, cigarros, coronas de flores, cientos de devotos festejaron hoy a las "ñatitas" (cráneos humanos) en inmediaciones del Cementerio General de La Paz.
Eduardo sostiene una vitrina de cristal con una calavera de un bebé de menos de dos años mientras lo presenta: "se llama Toñito y es muy juguetón, le quita los juguetes a mis niños"; es una de los cientos de "ñatitas" que hoy han acudido al Cementerio General de La Paz.