“Mis fotos generan otra dimensión”
Mis primeros pasos en la fotografía comenzaron hace más de cinco años. Pero la curiosidad ya la tenía antes. Se me despertó en casa, mirando imágenes de libros sobre la naturaleza y revistas. O cualquier publicación con fotografías. He visto cosas increíbles en su composición. Y unos colores que me llenaban el alma de tranquilidad.
Los que me conocen bien saben que hablo muy poco de mí.
Para mí, la fotografía no es más que una herramienta para proyectar una forma de mirar o sentir.
En lo que más coincide conmigo quien ve mis fotos, es que, a pesar de su sencillez, parece que guardan pequeñas historias o generan otra dimensión visual.
Me satisface mucho que la gente piense así o que vea mis fotografías y las comenten o también me den consejos para seguir mejorando.
No planifico las fotografías y en ocasiones ni los viajes, pues muchas veces viajo de un momento a otro, pero antes trato de investigar acerca del lugar al cual quiero ir.
Intento alejarme de lo turístico y captar lo que me sorprende, llego a los lugares y empiezo a mirar en todas las direcciones
Tengo la intención de mostrar lugares de Cochabamba desde otro punto de vista. Tratando de capturar colores, detalles que se encuentra allí, en nuestro alrededor, en la naturaleza, en lo urbano y rústico, que a su vez nos cuentan una historia . Antes, no contaba con una cámara pro o semi profesional. Sólo tomaba fotos mentalmente, practicaba de manera imaginaria. Luego, con el celular comencé a practicar de verdad.
Me gusta viajar como un alma libre, ir a conocer nuevos lugares, perderme entre lo antiguo y la naturaleza. Aventurarme para tomar nuevas fotos y así mostrar a los demás las increíbles cosas que se pueden encontrar en todos esos lugares.
Es interesante poder sentir esa sensación de agarrar tu cámara cuando ya estás allí, en todos esos lugares que se encuentran a muchos o pocos kilómetros de la ciudad, conocer nuevas comidas, hablar con los habitantes de las provincias, que muy amablemente te dicen los mejores lugares de su región o los lugares a donde poder ir a degustar sus platos.
Pero también en la ciudad se puede encontrar increíbles lugares para poder capturar fotos, salir a pasear, perderse entre las calles, llegar a los parques, plazuelas, iglesias; y buscar esas composiciones que se encuentran allí, pero que no todos las notan. O ver esos colores increíbles que caracterizan a la Llajta, esos lugares antiguos que aún continúan en nuestra región.
Después de cada salida fotográfica, es agradable poder llegar a casa impregnado con energías positivas.