Kennedy La dinastía sigue vigente
Texto: Ana Fernández Alonso Fotos:
El sobrino nieto del trigésimo quinto presidente de Estados Unidos, John Fitzgerald Kennedy, Joseph Patrick “Joe”, es congresista por el partido demócrata y un luchador por los derechos de la sociedad LGTB, además de estar en contra de las medidas que impactan directamente sobre las familias, las pequeñas empresas o los inmigrantes. Con él la dinastía continúa…
El joven, de 37 años, es congresista demócrata por el Estado de Massachusetts y se encuentra actualmente en su tercer mandato.
Según refleja su página web: (www.kennedy.house.gov/about-joe/full-biography) representa a una comunidad muy diversa que va desde los suburbios de Boston hasta las ciudades más desarrolladas de la costa sur de Massachusetts.
Respuesta crítica a Trump
Nació y creció en ese Estado y es prácticamente bilingüe en español; estudió en la Universidad de Stanford y es doctor en jurisprudencia por la Facultad de Derecho de Harvard. Lleva cinco años en el cargo y ha sido el encargado de responder al actual presidente de EEUU, Donald Trump, en el discurso del Estado de la Unión.
El joven y apuesto congresista, según informa el diario estadounidense The New York Times, contestó desde un instituto de formación profesional. En su respuesta pudimos ver una dura crítica hacia Trump, en la que el de Massachusetts afirmaba que “su mayor logro ha sido la represión del ideal estadounidense que dice que todos somos iguales, todos somos dignos y todos contamos”.
Asimismo, en español, se dirigió a una parte muy importante de la población a la que llamaba “soñadores”, a los millones de jóvenes indocumentados que fueron llevados de niños a EE.UU., les dijo: “Forman parte de nuestra historia y lucharemos por ustedes, no huiremos”.
Más coincidencias que diferencias.
Su carrera en el partido demócrata es una de las muchas coincidencias que tiene con el que fuera el número 35 de los presidentes del país. Pues, aparentemente, como su tío abuelo, se preocupa por los derechos de las clases medias y lleva a cabo medidas innovadoras para éstas.
Por ejemplo, queriendo ser lo más accesible posible ha implantado “horas de oficina” en todas las ciudades y pueblos de su distrito. También lucha por las necesidades de sus ciudadanos, desde beneficios para extrabajadores nucleares, hasta el desarrollo de nuevas estrategias económicas para la protección de los consumidores e iniciativas para los excombatientes.
Igualmente, es un buen representante para la igualdad del colectivo LGTB (Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales.
JFK ofreció, junto con su mujer y sus dos hijos, un aire más nuevo y joven a la Casa Blanca, ya que fue el presidente electo más joven y el primer católico en conseguir el cargo. Él quería, como el “nuevo de la dinastía Kennedy”, libertad y democracia para todo el mundo, por ello creó los Cuerpos de Paz, asociación que existe hoy en día y en la que participó Joe.
Mediante este proyecto cualquier estadounidense puede ayudar voluntariamente en cualquier lugar del mundo donde la solidaridad sea necesaria, en áreas de educación, agricultura o sanidad, entre muchas otras.
Otro de los puntos coincidentes entre estos dos políticos de la familia es su lucha por los derechos de los inmigrantes. En el caso de JFK también fue un defensor a ultranza de los derechos del colectivo de afroamericanos.
John Kennedy luchó como senador para que se pusiera fin a la segregación racial y, en 1954, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos prohibió esta separación en las escuelas públicas.
EL EJEMPLO
John F. Kennedy dejó al país emocionado y aturdido con su muerte. Le recuerdan por su liderazgo, personalidad y logros. Otros admiraban su capacidad para inspirar con sus discursos y su lucha por ayudar a los más desfavorecidos.
Parece que el nuevo Kennedy quiere seguir sus pasos y luchar por el legado de su tío abuelo, esforzándose para que se haga realidad.