Sebastián Justiniano, el niño de 3 años a quien le extirparon por error un riñón sano, aguarda la salida del avión de BoA que lo trasladará hacia el Estado de Sao Paulo, Brasil, donde continuará su tratamiento contra el cáncer. El menor viaja en compañía de sus padres además de especialistas del Ministerio de Salud, que cubrirá los gastos.