Dudas sobre los edulcorantes evitan uso contra la obesidad
E l médico Caomhan Logue, investigador del Centro de Innovación para la Alimentación y la Salud de la Universidad de Ulster, en Reino Unido, señaló que pese a que algunas investigaciones se confirmó que los edulcorantes pueden ser un aliado importante para este problema de salud pública, aún están rodeados de la desconfianza de la gente.
“Los edulcorantes pueden contribuir a la reducción del consumo de azúcar y calórico sin tener un impacto glucémico, pero existe en la población una duda generalizada de todo aquello que no es natural”, lamentó el especialista.
La obesidad y la diabetes se convirtieron en las últimas décadas en problemas de salud graves a nivel global.
Ambas enfermedades están relacionadas con el alto consumo de azúcar que ha superado los límites recomendados, por lo que algunos especialistas sugieren promover opciones más saludables, cambiar los tamaños de las porciones y reformular productos como los edulcorantes.
“Éstos son una opción segura para combatir esos problemas”, aseguró Logue.
El especialista explicó que entre sus ventajas está que estos productos proveen un sabor dulce, pero sin la carga calórica ni el impacto glucémico del azúcar, lo que ayuda a reducir el contenido energético a la dieta y a mantener un peso saludable.
“Proveen ese sabor dulce sin los efectos dañinos del azúcar; sin embargo, se ha creado la idea de que no son seguros para el consumo porque pueden generar cáncer, obesidad, entre otras enfermedades”, señaló.
El experto reiteró que, al no tener impacto en los niveles de azúcar en la sangre, ayudan a mantener esos niveles normales. No obstante, lamentó que las investigaciones hasta ahora no sean concluyentes respecto a los beneficios de estos productos.
“Se han hecho hallazgos mixtos de estudios de observación, algunos de los cuales han hallado asociaciones positivas con el riesgo de aumento de peso y diabetes”, indicó.
Agregó que muchas veces se cree que la gente obesa es la única que usa edulcorantes, lo cual tiene un impacto negativo sobre la veracidad de los estudios.
Hasta ahora, las investigaciones se enfocaron en los edulcorantes que tienen las bebidas, pero insistió que hay otras fuentes de ingestión de estos productos.
“Pueden ir desde la pasta de dientes, postres, productos lácteos con edulcorantes agregados, hasta la comida procesada. Los científicos deberían abarcar más acerca de las fuentes de ingestión”, señaló.
En ese sentido, Logue aseveró que hace falta investigación que aporte información más detallada y transparente, “la cual evite que las personas duden de los beneficios de estos productos”.
Finalmente, dijo que si bien los edulcorantes no son la respuesta mágica contra la obesidad, ya que ésta es multifactorial, si se utilizan dentro de un plan nutricional bien establecido, estos planes se hacen “más reales y con más posibilidades de que la gente los siga”, puntualizó.
CIFRAS
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad ha alcanzado proporciones epidémicas a nivel mundial, y cada año mueren, como mínimo, 2,8 millones de personas a causa de la obesidad o sobrepeso.
Aunque anteriormente se consideraba un problema confinado a los países de altos ingresos, en la actualidad la obesidad también es prevalente en los países de ingresos bajos y medianos.
Los Gobiernos, los asociados internacionales, la sociedad civil, las organizaciones no gubernamentales y el sector privado tienen una función crucial en la prevención de la obesidad.