¡A cuidarse! Entérate cómo el estrés afecta al organismo
Todos en algún momento de su vida han pasado por algún episodio de estrés. El estrés moderado tiene una función beneficiosa sobre el organismo, pero periodos sostenidos pueden alterar el sistema inmune y derivar en la aparición de diversas patologías.
“El estrés es la respuesta del organismo cuando se siente agredido o atacado por el entorno, existen ciertos niveles de estrés que nos ayudan a funcionar bien, pero cuando sobrepasan el umbral se convierten en una condición patológica”, señala la psicóloga Ximena Calatayud.
El proceso es el siguiente: cuando uno se siente bajo amenaza, el hipotálamo inicia un sistema de alarma en el cuerpo, a través del sistema nervioso y hormonas como la adrenalina y el cortisol. Por un lado, la adrenalina aumenta el ritmo cardiaco y la presión arterial; por otro lado, el cortisol aumenta la producción de glucosa en la sangre y altera las respuestas del sistema inmune, digestivo y reproductor.
Calatayud explica que las respuestas del ser humano al estrés es individual. “Se dice que es la enfermedad del siglo porque no causa una sola enfermedad, sino afecta a lo más vulnerable de cada ser humano”, señala. Es decir, unas personas ante el estrés se resfriarán, a otras les saldrá herpes, a otros alergias, a algunas se les caerá cabello, tendrán desórdenes estomacales; es diferente para cada individuo.
Los especialistas consultados coinciden que es importante saber gestionar las emociones y los problemas, realizar ejercicios de relajación regularmente, practicar técnicas de respiración profunda, ejercicios de tensión y distención muscular, practicar meditación, yoga y tener una alimentación saludable.
Entre los males que ocasiona el estrés prolongado está el dolor de cabeza y muscular, ansiedad, irritabilidad, insomnio, cansancio, poca memoria, infarto, taquicardia, arritmias, falta de apetito, problemas digestivos y bruxismo.
1. Piel y pelo
La dermatóloga Xiomara Trigo explica que “durante el estrés se libera cortisol y adrenalina, dos hormonas que favorecen al aparecimiento o agravamiento de algunas enfermedades que afectan a la piel como la urticaria, psoriasis, acné, vitiligo, alergias y rosácea”.
Señala que también afecta a la caída del cabello y favorece al envejecimiento con el aparecimiento prematuro de arrugas.
La especialista considera necesario hidratar la piel con cremas adecuadas al tipo de cutis, tener la higiene correcta, usar protector solar y -de ser necesario y según la edad- utilizar productos antiarrugas o antienvejecimiento desde el consumo de vitaminas y omegas (por vía oral), hasta cremas, “serum” preventivos.
“Para detener la caída de cabello el dermatólogo puede prescribir desde antioxidantes y vitaminas específicas hasta shampoo y lociones adecuadas según la edad y tipo de piel”.
2. Corazón
Las hormonas del estrés (la adrenalina y el cortisol) llegan al torrente sanguíneo y aumentan la tensión arterial incrementando el aporte sanguíneo al corazón que tiene que trabajar con más fuerza.
Edward García -especialista en medicina interna, cardiología y electrofisiología- explica que el estrés persistente y prolongado en el tiempo lleva a una sobrecarga de trabajo cardíaco, que se puede manifestar como la sensación de palpitaciones rápidas del corazón ( taquicardia), la sensación de palpitaciones irregulares del corazón ( arritmias) y síntomas del aumento de la presión arterial ( cefalea, fatiga).
Resalta que la presentación más grave es el desarrollo de eventos coronarios agudos (infarto de miocardio o angina inestable), que incluso pueden llevar a la muerte de las personas
Aconseja seguir “una dieta sana y adecuada, dormir la cantidad de horas suficientes y realizar actividad física rutinaria, ya que el bienestar físico trae consigo el bienestar mental”.
3. Músculos
La tensión muscular es -con seguridad-, uno de los síntomas de ansiedad más comunes y que afecta sobre todo a la espalda. El estrés provoca que los nervios se encuentren más rígidos y estos, a su vez, contraen los músculos y comprimen las vértebras.
La neurocirujana Sandra Campero explica que el estrés puede afectar tanto que se va manifestando de forma física en el organismo, causando contracturas musculares, dolores articulares y trastornos de memoria.
La especialista aconseja realizar ejercicio físico de una manera rutinaria. Señala que las actividades de meditación o yoga ayudan a manejar y combatir los síntomas del estrés.
4. Cerebro y la mente
Los especialistas explican que las personas con niveles altos de cortisol pierden más cantidad de neuronas en el hipocampo, un área del cerebro relacionada con funciones cognitivas como la memoria.
5. Aparato digestivo
Es frecuente que las personas con estrés tengan mayor malestar en el estómago, pues el proceso digestivo está íntimamente conectado con el sistema nervioso central.
La función del sistema digestivo se frena para que toda la energía del organismo pueda ponerse al servicio de esta situación de alarma.
BUENO Y MALO
El estrés transforma parte de nuestra vida y en niveles bajos no es perjudicial, ya que ayuda al organismo a estar alerta ante determinadas situaciones. Sin embargo, cuando es crónico o excesivo este mismo mecanismo se vuelve pernicioso.