¿Cómo debe alimentarse la madre durante la lactancia?
La leche materna responde perfectamente a las necesidades nutricionales del recién nacido, ajustando su composición a lo largo de los meses. Después del embarazo, el cuerpo de la mujer está preparado para iniciar la lactancia, periodo de suma importancia en el que va a alimentar a su bebé.
"La reserva de grasa generada durante el embarazo, servirá a la madre para la producción de la leche. A lo largo de la lactancia, este exceso de grasa suele ir desapareciendo y facilitando a la mujer alcanzar su peso habitual", afirma Luis Cortez, nutricionista de Nestlé.
Por eso en esta etapa es recomendable comer en menor cantidad pero con más frecuencia, teniendo a mano aperitivos saludables. Los alimentos aconsejados son granos y cereales integrales, frutas y vegetales frescos, además de alimentos que suministren suficientes dosis de proteínas, calcio y hierro, como la leche, espinaca, lentejas, entre otros. "La mamá puede permitirse un antojito dulce de vez en cuando, pero no a cada rato", aconseja el especialista.
Es bueno consumir dos porciones de alimentos proteicos al día, como carne, pescado o huevos, y mantener un correcto aporte de calcio de tres raciones o más al día, siendo una ración un vaso de leche, un vaso de yogurt o bien 40 gramos de queso. De esta manera se tratará de evitar la pérdida de calcio de los huesos. También es importante hidratar el cuerpo con ocho vasos de agua al día.
"Los beneficios de la lactancia materna para un bebé son múltiples y entre los más importantes está el fortalecimiento de su sistema de defensas, el cual asegura un buen estado de salud a corto, mediano y largo plazo. La leche materna proporciona todos los nutrientes, vitaminas y minerales que un bebé necesita para el crecimiento durante los primeros seis meses de vida. El bebé no necesita consumir ningún otro líquido o alimento durante este periodo", agregó el nutricionista.
La semana Mundial de la Lactancia Materna, celebrado de manera anual del 1 al 7 de agosto, es promovido por la Organización Mundial de la Salud y Unicef desde 1990 con el objetivo de proteger, promover y respaldar la lactancia materna, además de mejorar la salud de los bebés de todo el mundo. Este año la Semana Mundial de Lactancia Materna se lleva adelante con el objetivo de establecer la Lactancia Materna como clave para el desarrollo sostenible.