Salud mental: ¿escuchaste hablar de los vigoréxicos?
Aisa Villavicencio Antelo
No comen nunca un pastel de chocolate o una pasta Alfredo. Su refrigerador está lleno de huevos, atún y carnes magras.
Comen de cinco a siete veces por día, en pocas cantidades, todo muy medido y controlado.
Nunca comen carbohidratos para cenar y lo que ingieren al día lo cuentan por gramos.
La radicalidad de su dieta les impide socializar de una manera normal.
Aquellos que siguen este estilo de vida confiesan que cuando quedan de verse con sus amigos en algún sitio para comer, ellos les acompañan con un café o una coca-cola de dieta y luego se van a su casa a cenar un filete a la plancha con ensalada.
La dieta del vigoréxico también incluye una buena carga de batidos y suplementos con el objetivo de desarrollar músculos en menor tiempo, por lo cual se incluye un programa de dos o tres horas diarias de gimnasio.
Efectos y características
La psicoterapeuta Marlene Cossío Rojas nos habla de algunas características de los vigoréxicos:
- Consumen poca cantidad de grasa en un intento por aumentar masa muscular.
- Mirarse de forma constante al espejo y acudir a la balanza para compararse con personas que hacen fisiculturismo.
- Abandonar las actividades sociales para dedicar todo el mayor tiempo al gimnasio y así aumentar musculatura.
- Tienden a sentirse fracasados y bajos de autoestima.
- Incapacidad para relajarse sin preocuparse por el juicio de los demás.
- Interferencia con el trabajo y los estudios.
- Efectos peligrosos de anabolizantes y esteroides.
- Las desproporciones son muy frecuentes, por ejemplo, un cuerpo muy voluminoso con respecto a la cabeza.
- La sobrecarga en los huesos repercute de forma negativa ocasionando desgarres y esguinces.
- Depresión y suicidio en el peor de los casos.
Tratamiento
La especialista Marlene Cossío Rojas explica que para no caer en la obsesión y mantener un equilibrio hay que darse ciertos permisos para disfrutar los placeres de la vida y ponerse a dieta del temor al rechazo haciendo un retorno a la autoaceptación y al amor propio.
El tratamiento de la vigorexia consiste en la atención psicológica (psicoterapia) a largo plazo. En algunos casos, los antidepresivos se pueden utilizar para controlar la depresión, especialmente, en las primeras etapas del tratamiento.
Además, el apoyo de amigos y miembros de la familia también es fundamental para superar el trastorno dismórfico o vigorexia. La persona con una red social de apoyo tiene muchas más posibilidades de superación.
También se recomienda, despertar el interés del paciente por actividades culturales y entrenamiento donde un mayor nivel de interacción, con personas que le den perspectiva y que le animen a divertirse sin tomarse tan a pecho las cosas, le permitirá ampliar su visión. Igualmente, alejarse de las prácticas obsesivas y hacer elecciones positivas que le inspiren a sentirse bien; porque no vamos a negar que el cuidar cuerpo es necesario siempre y cuando no se caiga en excesos.
“Como decían los mayores, en el exceso está el pecado y el único pecado que no podemos permitirnos es perder el equilibrio. Me refiero al equilibro emocional que es el que nos ayuda a gestionar lo que sentimos, entender lo que pensamos y comprender lo que hacemos”, aseveró.
EJERCICIO OBSESIVO
Realizar prácticas deportivas sin importar la salud y las condiciones climáticas.
Sentirse mal cuando te das un gusto y sientes que tienes que hacer el mismo día o al día siguiente el doble de ejercicio, es una llamada de alerta al igual que el sentimiento de culpa cuando no has podido ejercitarte.
ESTEREOTIPOS
Los estereotipos de belleza y los factores de tipo cultural, social y educativo son decisivos para el desarrollo de la vigorexia. Por ello, el tratamiento debe enfocarse en modificar la conducta de la persona sobre su cuerpo. El autocontrol debe igualmente aprenderse para no cederle el control de sus emociones a los demás y así conservar la paz para no dejarse afectar excesivamente por opiniones externas.
SUPERACIÓN
Reconocer. Aceptar que se la padece y que se requiere ayuda profesional para superar el trastornó obsesivo -compulsivo.
Modificar. La autopercepción permitirá lograr una apreciación real y positiva de sí mismo.
Superar. El perfeccionismo y aprender a comprender que sólo en las imperfecciones está la perfección.
Recuperar. La normalidad y cultivar otros intereses para que sus percepciones y opciones se amplíen.