Cómo la inteligencia artificial cambiará el trabajo
Fábricas 4.0, digitalización, inteligencia artificial, análisis de datos, Internet de las cosas, robotización... Los nuevos métodos de trabajo inherentes a la cuarta revolución industrial acelerarán el crecimiento de la productividad de la economía global en los próximos 50 años.
Del estudio "Harnessing automation for a future that works" de McKinsey Global Institute se extrae que la automatización de los procesos laborales podría conllevar un incremento de la productividad global del 0,8 al 1,4 por ciento anual hasta el año 2065.
Una cifra superior al porcentaje del 0,3 por ciento que se experimentó durante la primera revolución impulsada por la máquina de vapor y también mayor al rango del 0,4-0,6 por ciento que se ha registrado en los años 90 y principios del siglo XXI, por el desarrollo de las tecnologías de la información y los primeros coletazos de la digitalización de procesos.
Los expertos de McKinsey consideran que la automatización de la economía puede capacitar a las empresas para reducir errores y mejorar la calidad y la rapidez y que, en algunos casos, será posible alcanzar resultados que van más allá de la capacidad física de los humanos.
Otro de los informes que auguran un aumento exponencial de la productividad es el titulado "Creating the future workforce today", que fue presentado por Accenture el pasado enero en el Foro de Davos.
En este estudio se afirma que la inteligencia artificial por sí sola tiene el potencial de duplicar los indicadores económicos de crecimiento y acelerar la productividad laboral al 40 por ciento en 2035 en los países desarrollados.
José Ruiz Cristina, director de Desarrollo de Negocio y de la línea de Big Data de Paradigma Digital, también está de acuerdo con este extremo y destaca que las tareas manuales "van a experimentar una mejora enorme gracias a la automatización".
En este sentido, Ruiz Cristina cree que habrá casos en los que "los resultados serán perfectos, mejor que los que puede conseguir una persona humana". "La revolución 4.0 va a cambiar la eficiencia en los procesos.
Gracias al "machine learning" los métodos en las cadenas de montaje serán más óptimos. Lo equiparamos a lo que que ha ocurrido con Zara. Se toman decisiones de producción en la misma temporada sobre la necesidad de aumentar o disminuir la fabricación de un producto.
El análisis de datos incrementa la capacidad de rectificación y reacción de las compañías", asegura el responsable de Paradigma Digital.