Viceministro: “No esperamos que juez nos favorezca”
El viceministro de Transparencia, Diego Jiménez, recalcó que no existe ninguna injerencia en el Tribunal de Justicia por el proceso contra el alcalde José María Leyes.
-¿Qué esperan ahora que un nuevo juzgado se hará cargo?
-Por un tema de responsabilidad con la investigación y responsabilidad jurídica, la jueza debe apartarse. Además, dejar que otro operador sea quien atienda el proceso.
-¿Los casos son distintos?
-Sí, son casos diferentes. La argumentación que usó la jueza diciendo que el imputado es el mismo carece de fundamentación. Hay cosas diferentes que se deben investigar en ambos procesos. Debemos recordar que los abogados defensores de Leyes se esforzaron en todas las audiencias que los casos eran diferentes, ahora ellos mismos dicen que no es lo mismo, esas son las incongruencias que debe conocer la población.
-Con la solicitud de conexitud de casos, ¿la defensa de Leyes da una señal de debilidad?
-A nuestro criterio, pese a que se ha demostrado que en el caso Mochilas I la licitación fue un engaño, porque llevaron la mochila para que armen de acuerdo a un prototipo, pese a eso, la defensa se basó en decir que no se pagó. Pero ahora existe una demanda de la empresa.
En Mochilas II, no sólo se armó el proceso de licitación, sino también se ha pagado y se generó un daño económico. Lo único que buscan es confundir a los jueces.
-¿Qué pasa con C. Leyes?
-Ha sido nombrada por muchos de los investigados como una de las personas que tenía la confianza de su hermano, incluso para tener una oficina donde sostenía reuniones y daba direccionamientos en varias licitaciones. A partir de José Miguel Padilla, Diego Moreno y José María Leyes, había una estructura que daba línea en las adjudicaciones.
-¿Se puede hablar de una organización criminal?
-Ya hemos señalado como una red de corrupción que debe ser investigada, y esto sale de las declaraciones de los testigos e imputados.
-¿Investigan los XI Juegos Suramericanos?
-Nos parece que es una cortina de humo de la oposición para tratar de distraer la situación del caso de corrupción de la Alcaldía.